Driving forces. Why giants thrive. The power of technology, globalisation and regulation

Cita: 

The Economist [2016], "Driving forces. Why giants thrive. The power of technology, globalisation and regulation", The Economist, London, 17 de septiembre, http://www.economist.com/news/special-report/21707049-power-technology-g...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Septiembre 17, 2016
Tema: 
Las empresas “tecnológicas” son uno de los principales ejes de la acumulación de capital
Idea principal: 

A través de las empresas en Silicon Valley se advierte la transformación en curso: el tránsito del supuesto “nuevo tipo de capitalismo” flexible, con una organización de las empresas (pequeña, ágil y fluida), hacia la “corporatización”, con altos niveles de concentración y en la que las empresas ascendentes aspiran a ser compradas por alguno de los grandes competidores.

La “aristocracia tecnológica” se caracteriza por haber trasladado la escala en dominio de sus mercados, tales son los casos de Google y Facebook. Asimismo, controlan las infraestructura de la información: Amazon en cómputo en la nube.

El artículo argumenta que la lógica de la escala propia de los gigantes industriales se ha transformado: lo esencial ya no es la eficiencia de la producción sino los efectos de red, “los nuevos gigantes tecnológicos usan las innovaciones tecnológicas para expandir sus redes”, el aumento de los puntos de la red y de la densidad de sus vínculos aumenta las ganancias y abre oportunidades de nuevos negocios.

Así, los gigantes tecnológicos se parecen cada vez más a las grandes corporaciones: se invierte más en ventas y creación de marca, servicios legales y control de calidad. Estas transformaciones tienen tres motores: tecnología, globalización y regulación.

La liberalización emprendida en la década de los años ochenta del siglo pasado ha beneficiado principalmente a las grandes corporaciones. Las operaciones fuera del país sede aumentan, abarcando redes de producción y redes de conocimiento. Se advierte un mayor gasto de I&D en el extranjero que además genera mayores beneficios (Datos de Strategy&).

Las empresas con sede en los países emergentes representan un desafío creciente a las empresas líderes: en la lista de Fortune reporta 156 empresas de mercados emergentes contra 18 en 1995. Ejemplo de ello es el rápido crecimiento de las empresas con sede en China como Tencent y Huawei.

La regulación creciente de las empresas también ha empujado el proceso de concentración. A partir de la quiebra de Enron en 2001 las autoridades estadounidenses lanzan varios instrumentos de regulación, lo que se refuerza tras la crisis de 2008. La ley Sarbanes-Oxley (2002) reformula la gobernanza corporativa; el Acta de Affordable Care (2010) reorganizó la industria de cuidado de la salud, mientras que el Acta Dodd-Frank regula los servicios financieros. Los cambios en la regulación implican mayores costos para las empresas y ello empuja a las empresas pequeñas y/o ascendentes a buscar una compra ventajosa, en tanto no pueden hacer frente a los procesos administrativos y legales. Los cambios regulatorios se expanden hacia Europa e incluso hacia China, aunque las regulaciones no se hacen homogéneas, sólo se multiplican, aumentando por tanto los costos de las empresas que buscan internacionalizarse.

Otro elemento importante es que las grandes organizaciones corporativas están mejor capacitadas para hacer frente a las coyunturas económicas de lento crecimiento o de crisis, echando mano de sus reservas o deslocalizando la producción, opciones que las empresas de menor talla no tienen a su alcance. De acuerdo con la consultoría BCG, la tasa de mortalidad de las empresas que cotizan en bolsa en un periodo de 5 años es de 36% pero entre aquellas con un valor superior a 1 mil millones de dólares, esa tasa es de 18%. Otra ventaja de las grandes empresas es que dado el lento crecimiento, están acumulando enormes montos de efectivo, que pueden utilizar en nuevos proyectos o en la compra de firmas ascendentes.

Datos cruciales: 

Gráfica Peso Cambiante: Distribución de las primeras 100 empresas en el mundo, clasificadas por capitalización de mercado. 2009 vs 2016. La gráfica muestra que los niveles de capitalización han aumentado: la mayor parte de las empresas se sitúa en los rangos de 75-100 mil millones de dólares y 100-150 mmd.

Buscando la fuente de la gráfica hallamos el documento: https://www.pwc.com/gx/en/audit-services/publications/assets/global-top-... (p. 30)

PwC: Formed in 1998 from a merger between Price Waterhouse and Coopers & Lybrand, PwC has a history in client services that dates back to the nineteenth century. Both accounting firms originated in London during the mid 1800s. Today, PwC serves 26 industries. Our industry-focused services in the fields of assurance, tax, human resources, transactions, performance improvement and crisis management have helped resolve complex client and stakeholder issues worldwide. We also apply our expertise and talents to help educational institutions, the federal government, non-profits and international relief agencies address their unique business issues. http://www.pwc.com/us/en/about-us/pwc-corporate-history.html

Datos de la UNCTAD muestran que las 100 primeras multinacionales clasificadas según sus ventas y empleos, poseen un promedio de 20 empresas tenedoras (holding companies), muchas de ellas domiciliadas en jurisdicciones de bajos impuestos, y más de 500 filiales operando en más de 50 países.

Actualmente, las 1000 mayores empresas que cotizan en bolsa en Estados Unidos obtienen 40% de sus ingresos mediante alianzas, cifra que era de sólo 1% en 1980, de acuerdo con Pankaj Ghemawat de la Stern School of Business, New York University.
http://www.ghemawat.com/

Nexo con el tema que estudiamos: 

El argumento liberal se sorprende de que la "economía digital" vire hacia la normalidad capitalista: la monopolización. También entre las empresas de la vanguardia tecnológica constatamos la tendencia a la concentración y centralización de capital característica de la acumulación. Más interesante es observar el grado de dinamismo que los gigantes tecnológicos pueden dar al capitalismo decadente. Por lo pronto, mediante estas actividades se están amasando algunas de las mayores fortunas de la actualidad; falta saber si los productos creados lograrán perdurar y, sobre todo, si conseguirán dinamizar al menos parte del aparato productivo.