Reproductive technologies. Gene editing, clones and the science of making babies. Ways of reproducing without sexual intercourse are multiplying. History suggests that they should be embraced

Cita: 

The Economist [2017], "Reproductive technologies. Gene editing, clones and the science of making babies. Ways of reproducing without sexual intercourse are multiplying. History suggests that they should be embraced", The Economist, London, 18 de febrero, http://www.economist.com/news/leaders/21717035-ways-reproducing-without-...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Febrero 18, 2017
Revista descriptores: 
Tema: 
Las posibilidades de la manipulación genética
Idea principal: 

Un artículo publicado el 14 de febrero por la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos apoya la investigación de las técnicas de edición de genes ya que pueden curar enfermedades genéticas como la hemofilia y la anemia de células falciformes incluso antes de que un embrión comience a desarrollarse.

Los avances tecnológicos están haciendo la clonación de seres humanos cada vez más factible. Algunos se horrorizan ante la perspectiva de la gente que “juega a ser Dios” con la reproducción, pero otras, cuyas vidas se han visto afectadas por la falta de hijos o alguna enfermedad genética, argumentan apasionadamente su derecho de aliviar su sufrimiento.

Las opciones se han ampliado constantemente. La inseminación artificial por donante (AID), que se remonta al siglo XIX y la fertilización in vitro (FIV), que se utilizó por primera vez en la década de 1970, se han convertido en técnicas de uso cotidiano. Lo mismo sucede con la inyección intracitoplasmática de espermatozoides (ICSI), inserción física de un esperma en un óvulo, permitiendo a hombres infértiles convertirse en padres.

Pronto podría aparecer la posibilidad de óvulos y espermatozoides elaborados a partir de células del cuerpo como la piel, en lugar de provenientes de ovarios y testículos.

Padres felices y niños sanos nos hacen pensar en aceptar cualquier tecnología reproductiva, y la seguridad de los procedimientos es una preocupación central. Los experimentos no se pueden realizar en fetos humanos y es complicado hacerlo en fetos de los parientes más cercanos de la humanidad, los grandes simios, ya que estos animales se encuentran protegidos legalmente.

¿Se podrá clonar a un niño que perdieron unos padres?, ¿Será posible clonar al marido de una viuda?, o ¿Podrán los padres ricos pagar para que sus hijos sean inteligentes, siendo estos los únicos que se podrán dar el lujo de hacerlo?

Las opiniones cambian tanto como la gente se acostumbra a las nuevas técnicas, por lo que cualquier solución debe ser adaptable, tomando en cuenta siempre las lecciones que nos ha dejado el pasado.

Nexo con el tema que estudiamos: 

En tiempos relativamente recientes se ha comenzado a investigar, experimentar y tratar con organismos genéticamente modificados, lo cual ha permitido pensar en situaciones que hasta ahora sólo ocurren en las películas de ciencia ficción. Esto, de llegar hasta sus últimas consecuencias, abriría paso a una etapa completamente nueva, en donde los humanos, gracias a nuevas características atribuidas a estos desarrollos, estaríamos en posibilidad de realizar actividades que podrían llevar nuestra capacidad de transformación del mundo a niveles que son difíciles de imaginar. Tal es el argumento liberal que defiende la posibilidad del clonaje humano.

Una perspectiva crítica debería atender los debates bioéticos en curso, particularmente el principio de precaución, particularmente espinoso en el caso del clonaje humano por carecer de medios de experimentación seguros y permitidos. En ese sentido, es probable que la ruptura de barreras provenga de situaciones límites, en particular, la ingeniería genética lidiando con enfermedades incurables y terminales. Otro tema esencial es el de la conciencia, estrechamente relacionado con las diferencias en el acceso a los supuestos beneficios de estas tecnologías.