Ten years on: Sheep and goats. American banks have recovered well; many European ones much less so. Most European banks were slow off the mark after the crisis

Cita: 

The Economist [2017], "Ten years on: Sheep and goats. American banks have recovered well; many European ones much less so. Most European banks were slow off the mark after the crisis", The Economist, London, 6 de mayo, http://www.economist.com/news/special-report/21721502-most-european-bank...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Mayo 6, 2017
Tema: 
El rezago en la recuperación de los bancos europeos con respecto a los estadounidenses después de la crisis de 2007
Idea principal: 

El artículo indaga en las causas que explican una recuperación más lenta de los bancos europeos, en relación a los estadounidenses después de la crisis de 2007.

Dos factores podrían explicar los diferentes ritmos de mejoría de los sistemas financieros en Estados Unidos y Europa: Hank Paulson y el Programa de Alivio de Activos en Problemas (TARP, por sus siglas en inglés). En Estados Unidos, Paulson forzó a los bancos y al gigante de los seguros, AIG, a aceptar inyecciones de capital del gobierno federal, y ya con el TARP en marcha, los bancos recibieron 245 mil millones de dólares de la ayuda total para recapitalizarse. En Europa, la ayuda gubernamental fue más dosificada y duradera. Los mayores prestamistas de Alemania e Italia, Deutsche Bank y UniCredit, aumentaron este año su capital en 21 mil millones de euros.

Sin embargo, hay otras causas que explican el relativo retraso europeo. Aunque entre 2007 y 2015 las ganancias retenidas de 90 bancos sumaron 348 mil millones de euros (mme) y se pagaron 223 mme en dividendos, los bancos no aumentaron sus reservas de capital. Por otro lado, la mayoría de los supervisores europeos se mostraron más reacios a rescatar a los bancos que en Estados Unidos. En contraste, las pruebas de estrés (stress tests) eran completamente inservibles. En Irlanda dieron visto bueno al sistema bancario antes que colapsara en 2010, y un año después dieron al banco Dexia permiso de operar meses antes de que se descubriera su participación en la crisis griega. Además, los europeos atravesaron por una nueva crisis, iniciada justamente en Grecia, cuyo resultado fue el Mecanismo Supervisor Único (SSM, por sus siglas en inglés) para un conjunto de bancos de la Unión Europea, los más grandes o los más importantes para las economías nacionales.

A pesar de la creación del Mecanismo Supervisor, la unión bancaria sigue incompleta. Por un lado, porque los políticos alemanes rechazan asegurar los depósitos en toda la región. Por el otro, porque la supervisión bancaria sigue siendo heterogénea: las normas contenidas en los acuerdos de Basilea contienen 160 opciones nacionales.

Otro problema de los bancos europeos es su enorme número. Particularmente en Alemania e Italia, hay tal cantidad de bancos y filiales que sus ganancias se ven reducidas, sobretodo en un periodo de bajísimas tasas de interés.

Los bancos europeos crecieron rápidamente entre 2007 y 2008, en múltiples países y áreas de negocios. Algunos, como Santander, pudieron resistir mejor la crisis debido que tenían un sólido modelo de negocios. Otros, como Deutsche Bank, se aventuraron en la banca internacional de inversión y comercial, con baja capitalización y enormes deudas.

A pesar de que Deutsche no ha necesitado la ayuda estatal, ha recurrido a sus accionistas en 3 ocasiones y ha recibido más de 20 mil millones de dólares para recapitalizarse. Desde septiembre de 2016, sus acciones se han comercializado en solo dos quintos de su valor en libros. Y recientemente pagó una multa de 3 mil millones de dólares en Estados Unidos, por vender hipotecas sin respaldo.

Algunos bancos europeos están replanteando su estrategia de negocios. El mismo Deutsche está fortaleciendo su base de depósitos en Alemania, tratando de aumentar su tasa de capital sobre activos de riesgo, al vender parte de sus activos de la división de administración, y reorganizando su división de inversiones para concentrarse en las multinacionales. Credit Suisse también introdujo cambios en 2015: el banco está buscando clientes entre los ricos de China, recortó los empleos de en la banca de inversión y es probable que ponga a la venta una parte de los negocios locales del banco. UBS también recortó sus servicios de inversión y se ha concentrado desde 2011 en la administración de la riqueza de los multimillonarios.

Este abandono de la banca de inversión explica en parte la creciente brecha entre las ganancias de los bancos estadounidenses y los europeos, incluso en su propio continente.

Datos cruciales: 

Gráfica. Aumento de capital en bancos estadounidenses y europeos, miles de millones de dólares (2008-2017)

La gráfica muestra las inyecciones anuales de capital recibidas por los bancos en Estados Unidos y en Europa. Se ve claramente que los estadounidenses recibieron el grueso de ayuda en 2009, con cerca de 120 mil millones de dólares, y después se redujo significativamente, casi a mil millones de dólares anuales. Los bancos europeos alcanzaron el máximo de capital en 2008 y 2009 con un poco más de 60 mil millones de dólares y en los siguientes años recibieron en promedio 20 mil millones.

Actualmente, el caso más grave de falta de supervisión es Italia: las deudas incobrables de los bancos han alcanzado 360 mil millones de euros y esperan un rescate financiero. UniCredit, el mayor banco italiano, reconoció una deuda incobrable de 8.1 mil millones de euros y está vendiendo activos para recapitalizarse. Banca Monte dei Paschi di Siena, el cuarto banco italiano más importante, está esperando un rescate financiero por tercera vez en pocos años.

Los ingresos de los bancos alemanes dependen 75% en los intereses, la mayor proporción de todos los países de la OECD.

Las ganancias de los bancos estadounidenses en la banca de inversión crecieron de 41% en 2007 a 48% en 2016 y las de los bancos europeos bajaron de 36% a 22% en los mismos años.

Nexo con el tema que estudiamos: 

El artículo muestra una de las caras de la competencia mundial en el sector financiero. El rezago del sector bancario europeo parece ser un síntoma de una economía regional estancada, incapaz de ser reanimada más que por el crecimiento de burbujas especulativas. El aumento de la deuda pública en los países periféricos de la Unión Europea, la salida de Gran Bretaña del pacto regional, el ascenso de los gobiernos de ultra derecha, parecen ser signos de una Europa en declive frente a otros competidores: la declinante pero aún vigorosa economía estadounidense y China.

Con límites y contradicciones, la vía adoptada por el gobierno de Estados Unidos, rescató a los bancos, los intervino, y los sobrevivientes dominan ahora los servicios financieros en escala mundial. Entre la especulación y el estancamiento, parece cuestión de tiempo para que otra gran crisis financiera estalle, a pesar de la mejor posición que tienen algunos de los mayores bancos.

Otros artículos que evalúan el funcionamiento del sistema financiero a diez años de iniciada la crisis pueden hallarse en:
http://let.iiec.unam.mx/search/node/ten%20years%20on%3A