Genetic engineering and transplantation. Gene editing may make pigs into organ donors for people. Retrofitting pig genomes

Cita: 

The Economist [2017], "Genetic engineering and transplantation. Gene editing may make pigs into organ donors for people. Retrofitting pig genomes", The Economist, London, 12 de agosto, https://www.economist.com/news/science-and-technology/21726057-retrofitt...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Agosto 12, 2017
Revista descriptores: 
Tema: 
La posibilidad de que por medio de la edición genética los cerdos se puedan convertirse en donadores para los seres humanos
Idea principal: 

Una consecuencia colateral de la mejora en la seguridad vial en Gran Bretaña y otros países ha sido que la cantidad de órganos humanos disponibles para trasplantes se ha reducido considerablemente y las listas de espera se han vuelto cada vez más largas. Sólo en Estados Unidos, más de 117 mil personas esperan donadores de órganos este año. Ante esta situación, es necesaria una fuente alternativa de órganos para donar.

La empresa de biotecnología eGenesis parece estar lista para dar una solución a este problema mediante las donaciones de órganos de cerdos a humanos. La idea de utilizar los órganos de los cerdos para donarlos por humanos ha estado presente desde hace algún tiempo y se debe a que son animales ampliamente estudiados, a que son fáciles de criar y a que sus órganos tienen aproximadamente el mismo tamaño que los de las personas. Aunque la idea de recibir trasplantes de órganos de cerdo puede producir asco a muchas personas, no parece tan mala cuando ese trasplante les puede salvar la vida.

No obstante, hay obstáculos más importantes para este “xenotrasplante” (o trasplante entre diferentes especies) que el asco que pueda producir al donatario. Uno es que el sistema inmunológico humano rechazará rápidamente el órgano; otro es que el injerto puede traer consigo infecciones provocadas por los que se conocen como retrovirus endógenos. Es a este segundo problema al que dicen los científicos de eGenesis que pueden hacer frente.

“Un retrovirus endógeno es una secuencia de ADN viral que ha sido incorporada en el genoma de un animal y que es posteriormente transmitida por generaciones junto con el resto de su ADN”. Estos virus pueden ser agentes infecciosos una y otra vez. Algunos experimentos recientes muestran que los retrovirus endógenos pueden esparcirse de células de una especie hacia otra, infectándolas y haciendo que se enfermen. En particular, los experimentos en laboratorio con cultivos de células han sugerido que los retrovirus endógenos porcinos pueden extenderse hacia las células humanas y hacer que enfermen. La posibilidad de que un órgano porcino trasplantado en un humano pueda hacer que las células humanas enfermen no ha sido aún comprobada, pero la existencia de un riesgo –por diminuto que sea– de que esto suceda es suficiente para que estas prácticas se prohíban por las autoridades médicas.

Para eliminar la posibilidad de que ese contagio pueda suceder, los científicos de eGenesis recurrieron a la técnica de edición genética CRISPR-Cas9 –conocida por su uso potencial para eliminar los genes defectuosos en embriones humanos– con la finalidad de eliminar los retrovirus porcinos endógenos y así limpiar el ADN de los cerdos y hacerlo seguro para el xenotrasplante. Realizar esto no fue tarea sencilla. Para hacerlo, tuvieron que buscar cada retrovirus porcino endógeno escondido en los más de 2.7 mil millones de pares base de los genomas de los cerdos. Se encontraron 25 retrovirus y se utilizó la técnica CRISPR-Cas9 para cortar el ADN en ese lugar y eliminar de la secuencia el retrovirus.

Los primeros intentos para eliminar los retrovirus fracasaron. Inicialmente, los científicos pudieron inhabilitar 90% de los retrovirus porcinos endógenos de la secuencia, pero se dieron cuenta de que el daño provocado si intentaban realizar más ediciones desencadenaba un mecanismo de autodestrucción celular llamado apoptosis. Tras detectar este problema, aplicaron junto a los editores moleculares una mezcla de químicos que detienen la apoptosis y así pudieron superar el problema y desactivar todos los retrovirus del núcleo de algunos fibroblastos. Posteriormente, trasplantaron estos núcleos modificados en óvulos de cerdas e implantaron los resultados en los úteros de otras cerdas. Esto tuvo como resultado el nacimiento de treinta lechones libres de retrovirus porcino endógeno.

Cuatro meses y medio después, la mitad de estos lechones aún vive. La edad de esos cerditos es la ideal para que sus órganos sean trasplantados a humanos. Sin embargo ese no será el caso de estos animales, que serán estudiados cuidadosamente buscando algún signo de anormalidad. La investigación sobre estos cerdos libres de retrovirus porcino endógeno continuará. Ahora, tras haber usado la edición genética para eliminar los retrovirus, se aplicará la misma técnica buscando abatir el problema del rechazo de los órganos porcinos por parte del sistema inmunológico humano. Ese sería un gran paso hacia los xenotrasplantes. “Incluso sería posible añadir genes que hagan que los órganos porcinos parezcan más humanos para nuestro sistema inmunológico. Llegado ese punto, la posibilidad de sustitutos cada vez mejores para los órganos humanos producidos en granjas porcinas especializadas estaría a la vuelta de la esquina”.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Las técnicas de edición genética son un fiel reflejo de la tecnología de punta en el capitalismo contemporáneo: el conocimiento científico ha llegado a un punto que hace algunos años apenas era imaginable o que sólo podía ser pensado en la ciencia ficción; además, en sus posibles aplicaciones el lado más prometedor (la eliminación de enfermedades que se transmiten genéticamente y la posibilidad de salvarle la vida a personas que necesitan un trasplante) y el más amenazador del desarrollo de la técnica (la producción de humanos en laboratorio, la manipulación genética para las finalidades del capital) se hacen presentes.

En esta perspectiva la tecnología CRISPR-Cas9 aparece como un nodo estratégico de la ingeniería genética y por ello es preciso dar seguimiento a las empresas y laboratorios que la están desarrollando.