El artículo muestra cómo el conglomerado chino HNA Group ha aumentado sus intereses en diferentes partes del planeta. En Brasil, podría adquirir acciones del aeropuerto Tom Jobim (Río de Janeiro) pertenecientes a la constructora brasileña Odebrecht, que se encuentra acusada por corrupción en varios países. En Alemania, HNA Group se convirtió en el principal inversionista en Deutsche Bank con 9.9% de las acciones, gracias a las gestiones de la sociedad financiera británica C-Quadrat Asset Management, filial de la austriaca C-Quadrat Investment AG, que le aconsejó no comprar más de 10% de las acciones, con el fin de mantenerse fuera del control de las autoridades alemanas. Además, desde marzo de 2017 HNA ha anunciado su participación en HSH Nordbank AG, un banco comercial del norte de Europa con sede en Hamburgo y Kiel, con intereses en el sector marítimo. Esta inversión consolidará la posición de HNA en el sector portuario, donde otras empresas chinas han hecho enormes adquisiciones.

La nota recupera la afirmación hecha por el director ejecutivo de HNA, Gao Jian, quien señaló que las múltiples adquisiciones del conglomerado son hechas “fuera del control de las autoridades chinas sobre la salida de capitales”. El autor señala que los líderes del Partido comunista y los banqueros chinos en Singapur brindan las ventajas en materia regulatoria para la expansión de HNA.