Carlos Pascual, de la consultora IHS MarkitLos, llama "geopolítica de la brecha" al reto que representará en los próximos años para los políticos del mundo alcanzar los objetivos del acuerdo de París. Acuerdo firmado en 2015 con el objetivo de reforzar los esfuerzos por frenar el cambio climático.

A pesar de que se espera un “punto de inflexión” de las energías renovables en donde lleguen a ser tan baratas que se pueda excluir los combustibles fósiles de la producción de electricidad, las energías renovables apenas producen 8% de la electricidad del mundo. El porcentaje es aún menor en relación a la energía para calefacción, transporte y refrigeración.

En este sentido, para el 2017 la energía nuclear sigue siendo más costosa que el carbón en la producción de energía, con alrededor de 150 dólares y 100 dólares respectivamente para producir un megawatt. Sin embargo, el gas, el sol y el viento son fuentes de energía más baratas que pueden producir un megawatt con alrededor de 50 dólares.

Las estadísticas en el nuevo libro "Domando el sol" de Varun Sivaram, concejal de relaciones exteriores de Washington D.C., muestran los obstáculos que deben ser superados para que la energía solar se convierta en una forma dominante de energía. Aunque el precio de un kilowatt-hora producido por paneles solares ha bajado (más por las economías de escala que por mejoras en el rendimiento), el precio de un gigabyte de información almacenado en un microchip ha bajado un millón de veces más rápido.

Además, Sivaram explica que los paneles solares tienen un costo competitivo, no obstante, cuanto más se usan se vuelven menos atractivos económicamente. Esto se da por ser una tecnología que no puede apagarse y prender, por lo que, en temporadas de mucho sol, el mercado de electricidad se inunda y caen los precios.

Una opción para resolver el problema anterior es la producción de baterías de almacenamiento. Sin embargo, aún no se han inventado baterías de iones de litio capaces de almacenar energía solar durante largos períodos de tiempo para compensar las variaciones estacionales de la luz solar. Los vehículos eléctricos (VE) podrían ser una opción para acelerar la transición energética y ofrecer una forma de almacenar electricidad. Pero la electrificación masiva trae sus propios problemas.

Para incorporar grandes cantidades de energías renovables, se necesitarán sistemas de energía interconectados para que países con abundancia de energía limpia puedan hacerla fluir a donde se necesita. Sin embargo, el riesgo de estos sistemas interconectados es que las líneas de transmisión de alta tensión y corriente continua pueden estar en mayor riesgo de ser intervenidas por terceros.

Los problemas descritos pueden superarse por el continuo desarrollo tecnológico, tanto en innovación de baterías para energía solar, como en innovaciones financieras que faciliten las inversiones en energías renovables. Elon Musk, en occidente está liderando estos esfuerzos, pero también en China hay importantes avances.