El excremento de pollo es un excelente fertilizante para el maíz orgánico, sin embargo, se necesitan 2.3 toneladas para preparar un sólo acre en la temporada de siembra [1], mientras que sólo son necesarias 0.1360 toneladas de fertilizante químico.

La venta de orgánicos tiene jugosas ganancias: aunque los rendimientos del maíz orgánico son aproximadamente 70% de los del maíz convencional, en el mercado es posible ofertar maíz orgánico a precios 50% mayores respecto del precio del maíz convencional y esta relación de precios compensa el déficit.

Aunque Estados Unidos es el mayor productor y exportador de maíz en el mundo, es un importador neto de maíz orgánico. A pesar de que entre 2015 y 2016, hubo un crecimiento de 28% en la cantidad de acres dedicados a la producción de maíz orgánico, llegando a un total de 214 000 acres, estos representan sólo 0.5% de los 90 millones de acres sembrado con maíz en Estados Unidos. Frente a esto, las importaciones de maíz orgánico aumentaron 42%, logrando alcanzar un costo de 160 millones de dólares muy por encima de los 36 millones de dólares alcanzados en 2014.

Existen tres razones por las cuales los agricultores en Estados Unidos no se han mudado al mercado de los orgánicos: 1) la inversión de tiempo y dinero es mayor, un terreno orgánico se cultiva sin químicos, ni componentes contaminantes durante tres años antes certificarse como orgánico. Esos tres años representan esfuerzo sin recompensa; 2) los cultivos orgánicos son más arriesgados, ya que son más vulnerables al clima, a la mala hierba, etc.; 3) requieren más trabajo.

[1] Un acre equivale a 4046.86 metro cuadrados en el sistema métrico decimal.