Smile, you're on camera. There will be little privacy in the workplace of the future. AI will make workplaces more efficient, safer—and much creepier

Cita: 

The Economist [2018], "Smile, you're on camera. There will be little privacy in the workplace of the future. AI will make workplaces more efficient, safer—and much creepier", The Economist, London, 31 de marzo, https://www.economist.com/news/special-report/21739426-ai-will-make-work...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Marzo 31, 2018
Tema: 
Integración de Inteligencia Artificial en empresas
Idea principal: 

Humanyze es un proveedor de programas informáticos de análisis de las personas (people analytics) que ayuda a las empresas a medir datos de comunicación corporativa para descubrir patrones acerca de cómo se hace el trabajo. Su método es simple, todos los empleados llevan una ID del tamaño de una tarjeta de crédito y de la profundidad de una caja de fósforos. Cada una de ellas contiene un micrófono, bluetooth, sensores infrarrojos y un acelerómetro, que registra las comunicaciones, monitorean la ubicación y los movimientos de los empleados.

Hitachi, un conglomerado japonés, vende un producto similar, a diferencia de Humanyze, este equipo contiene un "medidor de felicidad", funciona a través de algoritmos que cuantifican los niveles de humor del movimiento físico y detecta problemas de desempeño laboral y comercial.

Esta estrategia corporativa ha evolucionado gracias a los avances tecnológicos (internet, smartphones y la nube) y permite controlar a los empleados, observar cuándo están mirando un documento e incluso detectar quien podría estar robando archivos de la empresa. Esta situación ha despertado molestia entre los trabajadores que califican el proyecto próximo a una distopía orwelliana.

La empresa Amazon, es una compañía estadounidense de comercio electrónico y servicios de computación en la nube, recibió un par de patentes de pulseras que monitorean la ubicación exacta de los trabajadores de almacén y rastrean su mano y sus movimientos en tiempo real. The Economist considera que la tecnología permite a las compañías medir la productividad y el desempeño de sus trabajadores. Incluso, la instalación de circuitos de vigilancia permite supervisar las instalaciones de las compañías.

Microsoft ofrece un programa llamado MyAnalytics que reúne datos de correos electrónicos, calendarios, para demostrar a los empleados cómo pasan su tiempo, con qué frecuencia están en relación con los contactos clave y también si realizan sus actividades. Veriato, es una compañía de software que desarrolla y vende análisis de comportamiento del usuario y software de monitoreo de empleados.

Esta situación se torna más preocupante cuando el gobierno planea integrar la inteligencia artificial en sus mecanismos de vigilancia. El gobierno planea reunir un puntaje denominado “crédito social” que consiste en agrupar datos en línea de los ciudadanos para poder predecir su comportamiento en el futuro. No obstante, este proyecto debe estar sujeto a un acuerdo mutuo entre los empleados y los empleadores. En Estados Unidos la mayoría de los contratos de empleo otorgan a los empleadores derechos genéricos para supervisar empleados y recopilar datos sobre ellos, pero pocos trabajadores lo saben. Ben Waber, jefe de Humanyze, cree que estos datos deberían tener una mejor protección legal.

A medida que más empresas confían en firmas externas para recolectar y contrastar empleados e información, las preocupaciones sobre privacidad aumentarán, y los empleados pueden sentirse invadidos en su privacidad si no creen que hayan dado su consentimiento para compartir sus datos.

Nexo con el tema que estudiamos: 

La inteligencia artificial ha desempeñado diversas funciones en distintos ámbitos. La incorporación de la IA en las grandes corporaciones está orientada también como un mecanismo de vigilancia y observación del desempeño laboral de los trabajadores. El gobierno intenta aproximarse a una distopía orwelliana creando patrones de comportamiento y cuantificando el carácter social de los individuos para establecer parámetros de aceptación en la sociedad.

Estas evoluciones muestran la necesidad de una crítica de la tecnología capitalista: contrario al sentido común liberal que plantea que el problema es el uso de la tecnología, la llamada inteligencia artificial muestra que en su propio diseño, estas tecnologías son instrumentos de control social.