Disarmageddon. Despite North Korea, arms control is unravelling. Complacent, reckless leaders have forgotten how valuable it is to restrain nuclear weapons

Cita: 

The Economist [2018], "Disarmageddon. Despite North Korea, arms control is unravelling. Complacent, reckless leaders have forgotten how valuable it is to restrain nuclear weapons", The Economist, London, 5 de mayo, https://www.economist.com/news/leaders/21741546-complacent-reckless-lead...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Jueves, Mayo 3, 2018
Tema: 
El desmoronamiento de los acuerdos de regulación nuclear
Idea principal: 

A pesar del encuentro entre Kim Jong Un y Moon Jae-in, líderes de las dos Coreas, un acuerdo verdadero para asegurar una Corea del Norte sin armas nucleares sigue siendo remoto. The Economist considera que la dinastía Kim está compuesta por miembros tramposos y que el desarrollo de armas nucleares es parte fundamental para el mantenimiento de su poder. Además, mientras los expertos se centran en el análisis sobre la península coreana, en otros puntos del mundo los acuerdos de restricción nuclear se están desmoronando.

El 12 de mayo, Donald Trump, presidente de Estados Unidos decidirá el destino del acuerdo para frenar el programa nuclear iraní logrado en 2015. Mientras tanto, Benjamín Netanyahu, primer ministro de Israel, dio durante la primera semana de mayo una presentación diseñada para persuadir la salida de Estados Unidos del acuerdo. La peor parte es que los límites acordados entre Rusia y Estados Unidos para limitar sus arsenales nucleares está apunto de desaparecer, dejándolos sin regulación por primera vez en casi medio siglo.

Los estadistas de la guerra fría usaron el control de armas para disminuir el riesgo de aniquilación. La nueva generación de estadistas, más arrogantes, con nuevas tensiones y nuevas tecnologías están aumentando el proceso de diseminación de las armas nucleares, lo que pone al mundo en peligro de un error de cálculo que nos lleve a un Armageddon.

Los críticos del control de armas denigran los logros de los acuerdos. Por ejemplo, John Bolton, nuevo asesor de seguridad nacional de Trump, acusa al acuerdo de no haber impedido que Irán trabaje en misiles balísticos [ballistic missiles] o lleve a cabo acciones intimidatorias contra sus vecinos. Sin embargo las acusaciones del Bolton no forman parte de las intenciones del Plan de Acción Integral Conjunto de 2015, el cual buscaba evitar el camino de Irán hacia el desarrollo de una bomba y hacer que los intentos de este por hacer una en el futuro sean más fáciles de detectar. Irán ha mantenido su parte del acuerdo a pesar de no obtener los beneficios económicos prometidos.

Salir del acuerdo que se tiene con Irán puede tener altos costos. Al no existir acuerdo Irán estaría libre para llevar a cabo un programa de enriquecimiento de uranio, proceso previo a la producción de un arma. Otros países de la región, como Arabia Saudí y Egipto, podrían desempolvar sus planes para convertirse en potencias nucleares, ya que una decisión incorrecta socavaría el Tratado de No Proliferación Nuclear. Donald Trump tendría que trabajar más para generar confianza en Kim Jong Un, más cuando J. Bolton públicamente hace comparaciones entre Corea del Norte y Libia, país donde su lider (Muamar Al-Gadaffi)renunció a un programa nuclear y despues fue derrocado y asesinado por Occidente.

Además, se está generando un espacio de desconfianza producto de la reactivación de la competencia entre Estados Unidos y Rusia, que erosiona la posibilidad de una nueva regulación que debería ser urgente. Parece poco probable que Donald Trump y Vladimir Putin extiendan el acuerdo New START que caduca en 2021; mientras tanto Donald Trump promete que Estados Unidos volverá a tener el arsenal nuclear más grande y poderoso.

Al mismo tiempo, tanto John Bolton como sus homólogos rusos condenan el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio, diciendo cada uno que el otro lado lo está violando. John Bolton argumenta que este acuerdo sólo se puede mantener si incluye a países como China, cuestión que él sabe que no sucederá.

Un tercer escenario problemático lo plantea la tecnología. Mejorar la defensa antimisiles puede contribuir a minar la idea de la destrucción mutua asegurada, que ha servido para disuadir un primer ataque que desencadenaría una serie de respuestas. El 1 de marzo, Vladimir Putin mostró armas nucleares que desplegará para contrarrestar futuras defensas de misiles de Estados Unidos. Estamos ante una nueva carrera nuclear y ante todas las consecuencias que esta puede tener. Otro posible causante de inestabilidad en una crisis, podría ser la capacidad de un ataque cibernetico para paralizar el control y el comando nuclear del contrario, dicha acción podria interpretarse como el preludio a un primer ataque. Verificar las capacidades de los Softwares es más dificil que evaluar cuestiones físicas cuantificables, por lo que es urgente y no está siendo contemplado.

Extender el New START, mantener el Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio, crear nuevas regulaciones frente a las armas cibernéticas y mejorar el trato con Irán es necesario y sólo se puede lograr si hay voluntad. Los estadistas han olvidado que los acuerdos de regulación se hacen con enemigos, no con aliados, y las restricciones no sólo tienen como consecuencia la restricción sobre las armas de destrucción con capacidad innimaginable, también proporcionan conocimiento de las capacidades e intenciones del "otro", conocimiento que en una crisis puede reducir el peligro de cometer un error de calculo.

Los procesos de regulación son necesarios y necesitamos reforzarlos, de no tenerlos la consecuencia será un mundo donde los países se armen ante el desconocimiento de las acciones de sus enemigos y donde cada pequeña acción pueda escalar en el peligro de una guerra nuclear.

Datos cruciales: 

1. El Acuerdo de Reducción de Armas Estratégicas III o New START, entre Rusia y Estados Unidos, que limita el número de ojivas estratégicas desplegadas a 1550 cada uno llegará a su fin en 2012.

2. Los acuerdos de control sobre las armas estratégicas entre Estados Unidos y Rusia iniciaron en 1972.

3. El Tratado de Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio se logró en 1987 entre Ronald Reagan, presidente de los Estados Unidos y Mijail Gorbachov, líder de la Unión Soviética. El acuerdo desmanteló 2 700 cohetes nucleares con un alcance de entre 500 y 5 500 kilómetros.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Es necesario crear, mejorar y mantener los acuerdos de regulación nuclear si no deseamos una nueva configuración en el escenario internacional definida en su totalidad por el terror. Destruir un acuerdo nuclear logrado hoy compromete a la totalidad de la población y a las generaciones futuras, por tanto, en la actualidad estamos una vez más en un momento de crisis (palabra derivada del verbo griego κρίνειν que quiere decir juzgar, decidir, etc.) donde se tiene que decidir entre cuál es el futuro que se desea para el mundo, y donde siempre existe la posibilidad de que se llegue a decisiones que comprometan el futuro.