A load of rubbish. Emerging economies are rapidly adding to the global pile of garbage. But solving the problem should be easier than dealing with other environmental harms, says Jan Piotrowski

Cita: 

The Economist [2018], "A load of rubbish. Emerging economies are rapidly adding to the global pile of garbage. But solving the problem should be easier than dealing with other environmental harms, says Jan Piotrowski", The Economist, London, 29 de septiembre, https://www.economist.com/special-report/2018/09/29/emerging-economies-a...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Septiembre 29, 2018
Tema: 
El problema de la gestión adecuada de los residuos sólidos en las economías emergentes
Idea principal: 

Las oficinas de Miniwiz (una compañía de operación internacional y de propiedad privada dedicada a reciclar basura de los consumidores y residuos industriales) en el centro de Taipei en Taiwán, son el claro ejemplo de cómo se puede dar un segundo uso a la basura. El mobiliario del edificio está hecho de materiales reciclados; en lugar de vender productos nuevos, reutilizan lo que ya se creía basura: “el café se sirve en vasos hechos con pantallas de iPhone rotas”, las sillas de la sala de conferencias son de botellas de plástico recicladas.

Con la Revolución Industrial que abarco de 1760-1840, no sólo se modificó el ritmo de producción, también se aumentó la cantidad de personas y por ende de desechos. Según un informe del Banco Mundial, en 2016 generamos mundialmente 2 mil millones de toneladas de desechos de basura doméstica y comercial, producimos 740 gramos de basura por persona al día, sin contar a las industrias.

“Los residuos sólidos industriales contienen materiales más valiosos como chatarra y durante mucho tiempo, han sido mejor administrados por las empresas con fines de lucro”. Además, está el problema de la gestión adecuada de los residuos; existe una relación directa entre las economías más avanzadas y la cantidad de residuos que están generan; estas economías producen 34% de la basura mundial cuando sólo representan 16% de la población total. En el informe del Banco Mundial se advierte sobre el crecimiento desmedido de la basura; se necesita desligarlo del crecimiento económico y con los supuestos de mejoramiento de los niveles de vida; cuanto más tenemos, más gastamos y por ende desechamos más. El informe apunta a la necesidad de cambiar de paradigma de consumo para hacer las economías más circulares, donde se recicle, se reduzca y se reutilice.

El problema de los residuos globales puede no representar un desavío tan difícil de resolver como el cambio climático. Derivado de las acciones locales para limpiar y reciclar se puede producir un ciclo virtuoso con doble aprovechamiento de residuos, donde además de eliminarlos también se aprovechan para reciclarlos y regresarlos a la vida útil. Pero migrar a una economía más circular no será nada fácil, en la actualidad 37% de los residuos sólidos se destinan a vertederos en todo el mundo, 33% a vertederos abiertos, 11% a incineradores; además sólo 13% de los residuos sólidos municipales son reciclados a nivel mundial. Y verter los desechos al mar, tarde o temprano cobrará la factura. En agosto de este año, el “Mar Arábigo arrojó 12 000 toneladas de escombros y basura a las orillas de Mumbai en dos días”; los pescadores del mar de Arabia se quejan que pescan 4 veces más plástico que peces.

Se estima que la industria de residuos podría causar entre 8 y 10% de las emisiones de gases de efecto invernadero para el 2025; si no se actúa, la basura podría aplastar al planeta.

La preocupación ambiental está alertando a políticos y público en general. Desgraciadamente los países de bajos ingresos son los que están más atrasados en cuando a políticas de manejo de residuos: aproximadamente 90% de sus residuos terminan en vertederos abiertos, comparado con los países en vías de desarrollo, donde se recoge la mitad de los residuos municipales. Para reducir estas proporciones es necesario aumentar la inversión en infraestructura de residuos, como vertederos gestionados o de baja contaminación.

Aunque los países ricos ya cuentan con esta infraestructura, “necesitan mejorar la recuperación de materiales valiosos a partir de sus flujos de residuos”. La confianza que tenían en la economías emergentes como China, que recicló 106 millones de toneladas de plástico del mundo en 25 años, terminó en enero de este año, cuando ese país asiático prohibió las importaciones de casi todo el plástico y papel sin clasificar, dejando a los países occidentales con toneladas de basura, además de preguntas sin respuesta acerca de cómo mejorar la capacidad de los recicladores domésticos.

En cuanto al reciclaje, políticos en Europa y los estados y ciudades estadounidenses, actualmente están difundiendo ambiciosos objetivos además de intentar modificar la manera en que gestionan su basura. Las multinacionales por ejemplo le están apostando a modelos se servicios en lugar de vender productos. Por otra parte, las regulaciones para el manejo de residuos, son necesarias pero pueden parecer poco claras. Esta es una tarea para los hacedores de políticas para invertir en el reciclaje a gran escala que se ve “desalentada por la disminución periódica del costo de los productos primarios, con la que compiten los recicladores”.

El aumento en el consumo, propiciado por el crecimiento económico de Taiwán en 1990, trajo consigo la incapacidad para limpiar sus desechos. Para 1996, dos tercios de los vertederos de ese país se encontraban en plena capacidad. El gobierno de Taiwán, haciendo frente a las crecientes protestas, se comprometió a construir 24 incineradores, para quemar los residuos en su lugar, además de incentivar a los taiwaneses a generar menos basura. En los hogares se cobra por los residuos que generen a excepción de los que son reciclables como en papel, vidrio, aluminio, etc. Hace 20 años un taiwanés producía 1.15 kg de basura diariamente, hoy en día produce 850 gramos.

Datos cruciales: 

1.- La industria del reciclaje en Taiwán genera ingresos anuales de más de 2 mil millones de dólares.

2.- Según un nuevo informe del Banco Mundial, en 2016 el mundo generó 2 mil millones de toneladas de residuos sólidos municipales (basura doméstica y comercial).

3.- Eso equivale a 740 gramos (1 lb 6 oz) cada día por cada hombre, mujer y niño en la Tierra.

4.- El problema es la gestión de residuos, se emiten 30 000 millones de toneladas de carbono, que es invisible pero resulta muy peligroso.

5.- Las economías avanzadas representan 16% de la población mundial, pero producen 34% de su basura.

6.- Actualmente 37% de los residuos sólidos se destinan a vertederos en todo el mundo, 33% a vertederos abiertos, y 11% a incineradores.

7.- Sólo 13% de los residuos sólidos municipales son reciclados a nivel mundial.

8.- En agosto aparecieron en las costas del Mar Arábigo 12 000 toneladas de escombros y basura a las orillas de Mumbai en dos días.

9.- Los gases de efecto invernadero de la industria de residuos, principalmente emitida por reacciones químicas en vertederos, podrían representar de 8-10% de todas las emisiones GEI para 2025.

10.- El gobierno de Taiwán se comprometió a construir 24 incineradores, plantas para quemar los residuos en su lugar, a un costo de 2.9 mil millones de dólares.

11.- Una persona típica taiwanesa ahora arroja 850 gramos de basura al día, a comparación con 1.15 kg que arrojaba hace 20 años.

12.- Norte América recicla aproximadamente 34%, incinera 10% y el restante 56% va a rellenos sanitarios.

13.- Europa y Asía central, reciclan aproximadamente 20%, compostan 10%, incineran 20%, 25% va a rellenos sanitarios y 25% restante en vertederos abiertos.

14.- Latinoamérica y el Caribe, reciclan solo 5%, 80% va a rellenos sanitarios y 25% a vertederos abiertos.

Nexo con el tema que estudiamos: 

El problema de la gestión adecuada de los recursos, es un problema de afectación mundial, que si no se controla con políticas adecuadas, causará costos elevados en el intento de solución cuando esto llegue a sus límites, provocando déficit para todo el mundo afectando a los más vulnerables.

La "economía circular" (reciclar, reutilizar) se presenta cada vez más como una alternativa viable ante el posible agotamiento de los recursos materiales para la reproducción del capitalismo. Además de contribuir a reducir el consumo productivo de la naturaleza hecho por el capitalismo, el reciclaje parece ofrecer espacios para la valorización del capital y la obtención de ganancias. No obstante, parece poco probable que esto pueda contribuir a contrarrestar la destrucción del ambiente y a dinamizar la acumulación en una medida significativa.