Extreme weather. Greenhouse-gas emissions are increasing the frequency of heatwaves. And it will get worse in future

Cita: 

The Economist [2019], "Extreme weather. Greenhouse-gas emissions are increasing the frequency of heatwaves. And it will get worse in future", The Economist, London, 27 de julio, https://www.economist.com/science-and-technology/2019/07/25/greenhouse-g...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Julio 27, 2019
Tema: 
Los estudios de atribución para la prevención de los climas peligrosos.
Idea principal: 

El verano de 2019 ha sido uno de los más calurosos para Estados Unidos y Europa. Las advertencias sobre la ola de calor obligaron a más de 100 millones de estadounidenses a permanecer dentro de sus hogares. En Europa, por culpa del aíre cálido del Sahara, junio de 2019 fue el verano más caluroso del continente. Con forme ha pasado el tiempo estas situaciones se han vuelto más comunes. En 2003, producto de un periodo de calor letal que duró dos semanas, decenas de miles de personas murieron prematuramente en el continente europeo, en ese instante se consideró que un evento así ocurriría una vez cada 1,000 años. Sin embargo, conforme pasaron los años, estos acontecimientos se volvieron cada vez más frecuentes.

Anteriormente solo se culpaba al calentamiento global de generar tendencias climáticas, esta situación cambió en 2004 después de la publicación del primer estudio de atribución[1] basado en el periodo de altas temperaturas del 2003. Según el estudio, las temperaturas de ese año rompieron con el promedio de registros elaborado desde hace 150 años. A partir de un ejercicio comparativo, Peter Stott, de la Oficina Meteorológica británica, simuló lo que ocurriría si se comparara un mundo con gases de efecto invernadero y una realidad sin ellos. Como resultado obtuvieron que la ola de calor del 2003 fue tan grave por culpa del cambio climático.

Desde ese entonces los estudios sobre el cambio climático se volvieron más comunes. En 2017 una investigación sobre los gases de efecto invernadero reveló que una sequía al sur de California, Estados Unidos, y una ola de calor en Europa, fueron causadas por los efectos de la emisión de estos gases contaminantes. Este tipo de eventos tienden a ser cada vez más probables por las consecuencias del cambio climático.

El objetivo actual es ofrecer estudios sobre las consecuencias del cambio climático en los desastres naturales al momento en que ocurren. Met Office, el servicio meteorológico nacional del Reino Unido, junto con sus homólogos franceses, holandeses y alemanes, son los principales productores de estos análisis. Sin embargo no todos los países cuentan con la capacidad de elaborar trabajos de investigación climática tan detallados como los del Reino Unido. Por este motivo, la Unión Europea llevará a cabo un proyecto, cuyo objetivo será el de generar este tipo de estudios meteorológicos para todo el continente, dicha propuesta comenzará en noviembre de 2019.

Esta información preventiva podría ayudar a los gobernantes a tomar cartas en el asunto y elaborar proyectos para la prevención de daños. Además, los estudios de atribución ya están siendo utilizados en tribunales y audiencias de derechos humanos, dentro de juicios que plantean que las empresas productoras de combustibles fósiles son causantes de acelerar el cambio climático.


[1]Estos estudios son elaborados anualmente desde 2014 por World Weather Attribution (WWA, por sus siglas en inglés). Esta es una organización internacional en la que colaboran diversas universidades y organizaciones de Europa, entre ellas se encuentran: el Instituto del Cambio Ambiental de la Universidad de Oxford; el Real Instituto Meteorológico de los Países Bajos; el Laboratoire des Sciences du Climat et del l'Environment; la Universidad de Princeton; el Centro Nacional de Investigación Atmosférica y el Centro Climático de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja. El objetivo de su trabajo es generar estudios que revelen la influencia de las actividades humanas en la frecuencia de fenómenos meteorológicos como las olas de calor, las sequías y las tormentas eléctricas. Fuente: www.worldweatherattribution.org
Datos cruciales: 

1. Durante el verano de 2019 se registraron temperaturas de 40°C en la costa este.

2. En el verano de 2019, en la cima del Mont Blanc, la montaña más alta de Europa occidental, los instrumentos de medición del clima registraron 7°C. Lo normal es que la temperatura de junio esté por debajo de cero.

3. En Gallargues-le-Montueux, cerca de Nimes, en Francia, las temperaturas alcanzaron un máximo de 45.9°C. El récord anterior en cualquier lugar de ese país fue 1.8°C más bajo.

4. La división de investigación climática de la Oficina Meteorológica de Gran Bretaña, descubrió que las olas de calor ocurrirán una vez cada 100 años y serán cada vez más comunes en la década de 2040.

5. World Weather Attribution descubrió que el cambio climático era responsable de intensificar los niveles de precipitación entre 8% y 19%.

6. Desde 2012, el Boletín de la Sociedad Meteorológica Americana ha publicado un compendio anual de estudios de atribución. Aproximadamente 70% de los eventos analizados muestran cierta influencia del cambio climático.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Las actividades industriales y el calentamiento global son dos factores que van de la mano. Si no es posible cambiar las formas de producción, es necesario comenzar a hacer más estudios sobre la relación entre cambio climático y desastres naturales. En el presente artículo se muestran unas cuantas formas en las que Europa y Estados Unidos están lideando con el problema, ademas de hablar sobre estudios preventivos de la catástrofe.