Las decisiones que adoptemos ahora son fundamentales para el futuro y la criosfera

Cita: 

Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático [2019], Las decisiones que adoptemos ahora son fundamentales para el futuro y la criosfera, 25 de septiembre, https://www.ipcc.ch/site/assets/uploads/sites/3/2019/09/SROCC_PressRelea...

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Martes, Septiembre 3, 2019
Tema: 
Amenazas del cambio climático para la supervivencia humana
Idea principal: 

El Informe especial sobre el océano y la criosfera en un clima cambiante, elaborado por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), muestra un panorama sumamente preocupante, pues según lo publicado los cambios ejercidos en el medio ambiente como producto de la actividad del ser humano son inevitables.

De acuerdo con el informe, el calentamiento global es 1°C mayor respecto a los niveles preindustriales, debido principalmente a la enorme emisión de gases de infecto invernadero. Esta situación ha repercutido profundamente en los ecosistemas al absorber el calor generado, principalmente en los océanos del mundo y la criosfera, indicó Ko Barret, vicepresidenta del IPCC. Tal situación ha desencadenado en el aumento de los niveles del mar como resultado de la fusión de los glaciares y mantos de hielo, así como en el incremento en la temperatura de los oceanos y su consecuente acidificación.

Aunque parezcan fenómenos lejanos para la gran mayoría de la población, la realidad muestra otra situación, pues de acuerdo con Hoesung Lu, presidente del IPCC, las afectaciones en las regiones del Ártico, Antártida y zonas altas montañosas, inciden de manera directa en ámbitos como el concerniente al tiempo y clima, alimentación y agua, energía, comercio, transporte, actividades turísticas, salud y bienestar, cultura e identidad. La situación adquiere un tenor mas grave si se toma en cuenta que 680 millones de personas que habitan en zonas costeras de baja altitud y 670 millones de personas que viven en regiones de alta montaña, dependen directamente de estos ecosistemas.

Las simulaciones y escenarios futuros que se producirirían de continuar con la tendencia actual de emisiones de gases de efecto invernadero son ilustrativas. El retroceso de la criosfera (zonas congeladas del planeta) produciría serios peligros para las poblaciones que habitan en zonas montañosas, tales como desplazamientos de tierra, avalanchas, desprendimientos de roca o inundaciones, ademas de que las alteraciones en la disponibilidad de agua afectarían a sectores como el agrícola o hidroeléctrico.

Por otro lado, el derretimiento de glaciares ubicados en Groenlandia y la Antártida, con el consecuente aumento en los niveles de mar, ocasionaría un aumento significativo de los fenómenos asociados a lo que se conoce como “episodios de nivel de mar extremo”, lo que se traduciría en una mayor incidencia de mareas altas, tormentas intensas y ciclones tropicales de mayor intensidad. Los pronósticos del aumento del nivel del mar apuntan hacia un aumento de entre 60 y 100 cm para el año 2100, de continuarse con la tendencia actual de emisión de gases. Esto no solo supondría una amenaza directa para la habitabilidad en aquellas naciones insulares, sino también un acortamiento en la periodicidad de los fenómenos que se producían cada 100 años.

Las repercusiones para los océanos continúan. El calentamiento de los océanos representará un desafió considerable si se toma en cuenta que para el año 2100 se espera que absorban entre cinco y siete veces mas que lo registrado en los últimos 40 años. Las consecuencias de esto estriban en que el calentamiento afecta de manera directa el suministro de oxigeno y nutrientes necesarios para la vida marina, fenómeno que se agrava aun mas si se toma en cuenta que la acidificación de los océanos, producto de la absorción de emisiones de carbono, contribuye a los cambios en la distribución y abundancia de la población de peces. Tal situación podría tener impactos directos en la oferta de productos alimentarios y la conformación de riesgos para la salud nutricional y seguridad alimentaria.

Asimismo, las consecuencias de la perdida de hielo y terrenos de permafrost en el Ártico entrañan amenazas que van más allá del aumento en los niveles del mar. Las proyecciones apuntan hacía la perdida del 70% de este tipo de terrenos. No obstante, casi el doble del carbono presente en la atmósfera se encuentra contenido en el permafrost de las regiones ártica y boreal, por lo que la concentración de estos gases podría aumentar considerablemente.

Con base en esto, resultan relevantes la serie de recomendaciones que el informe arroja, pues mas que ser un manual para evitar lo inevitable, es un recordatorio sobre la utilidad que representa la toma de acciones y la generación de conciencia en pro de la limitación del calentamiento global. La restricción de la magnitud de los cambios y el aumento de la capacidad de adaptación gobiernos y comunidades, la gestión de los riesgos conexos y el fomento de la resiliencia en pro de un futuro sostenible, son acciones que al final del día redundan en beneficios para el conjunto de la sociedad y la capacidad de supervivencia de ésta.

Datos cruciales: 

1. El informe fue elaborado por 104 autores y editores-revisores de 36 países, 19 de los cuales eran países en desarrollo o economías en transición.

2. El IPCC comprende tres grupos de trabajo: el Grupo de Trabajo I, que se encarga de las bases físicas del cambio climático; el Grupo de Trabajo II, que se encarga del impacto, la adaptación y la vulnerabilidad; y el Grupo de Trabajo III, que se encarga de la mitigación del cambio climático. También tiene un Grupo Especial para los Inventarios Nacionales de Gases de Efecto Invernadero, que elabora métodos para estimar las emisiones y remociones.

Trabajo de Fuentes: 

El informe completo se encuentra en la siguiente liga: https://report.ipcc.ch/srocc/pdf/SROCC_FinalDraft_FullReport.pdf

Nexo con el tema que estudiamos: 

Resulta relevante los cambios descritos por el informe del IPCC, pues de ellos y de la toma de acciones que se presenten dependerá el futuro de gran parte de la humanidad. Sin embargo, los incentivos para continuar con la actual tendencia de emisiones por parte de las grandes empresas transnacionales y principales potencias también son considerables, especialmente si se toma en cuenta que el deshielo en zonas de la Antártida y los Polos representa una oportunidad para la búsqueda y ubicación de recursos estratégicos y minerales. Esta tendencia ya ha empezado a ser documentada por algunos medios que destacan el papel que Rusia, Estados Unidos y otras potencias, los cuales han empezado a realizar expediciones hidrográficas.