Back on top. American private enterprise dominates the corporate premier league again, thanks to waning valuations of state-backed firms

Cita: 

The Economist [2013], “Back on top. American private enterprise dominates the corporate premier league again, thanks to waning valuations of state-backed firms”, The Economist, London, 21 de septiembre, http://www.economist.com/news/briefing/21586558-american-private-enterpr...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Septiembre 21, 2013
Tema: 
Reposicionamiento de las empresas trasnacionales de Estados Unidos.
Idea principal: 

En septiembre de 2009, de las diez empresas más grandes del mundo sólo tres eran estadounidenses: Exxon Mobil, Microsoft y Walmart. La lista estaba dominada por gigantes estatales como PetroChina, China Mobile, ICBC y Petrobras. Estados Unidos estaba en declive por la crisis subprime y porque el capitalismo de estado desplazaba a la empresa privada, pero su resurgimiento ha sido notable, actualmente nueve de las diez empresas más valiosas son estadounidenses. En la lista de las 50 mejores empresas, la participación de Estados Unidos es mucho más baja, pero se mantiene por arriba del 50% y recientemente ha comenzado a elevarse. Para lograrlo hay tres elementos que entran en juego.

El primero es la mezcla estadounidense de resistencia y dinamismo. La vieja guardia: Exxon, General Electric y Johnson & Johnson; la antigua estructura financiera ha sido bombardeada; Chevron se ha convertido en la segunda petrolera más valiosa del mundo; Intel e IBM han cedido sus puestos a Google y Apple. Al parecer hay más rotación entre las empresas más grandes de Estados Unidos que las del resto del mundo.

El segundo es el bajo desempeño europeo. Suiza y Gran Bretaña tienen participación desproporcionada en la lista de las 50 mejores empresas incluyendo los gigantes Nestlé, Roche, HSBC y BP, pero el resto del continente sólo tiene cuatro empresas. Parte de esto se debe a la preferencia de la financiación bancaria sobre el mercado de valores, la dificultad de consolidación a través de adquisiciones transfronterizas y la crisis del euro.

El tercero son las altas y bajas de las empresas estatales, particularmente las de China. El valor de las más grandes empresas estatales ha venido cayendo en los últimos años, lo cual se debe a su sobrevaloración inicial, a la caída en los precios de los commodities y a la reciente ola de ventas en los mercados emergentes. Además, es posible que los inversores confían cada vez menos en las empresas respaldadas por el Estado, envueltas en acusacioens de corrupción, bajos dividendos para sus accionistas y administración por criterios políticos.

El éxito de las compañías estadounidenses es externo. Seis de las empresas que están en la lista de las diez mejores venden más en el extranjero que en casa, y en la mayoría de los casos, la proporción de las ventas al exterior va en constante aumento.

Aun así, la dominación estadounidense no está garantizada. De la lista de las 50 mejores empresas, la participación de las estadounidenses es más baja y su recuperación es menos pronunciada, ahora ya no dominan por ganancias. Y aunque el precio de las acciones de las empresas de los mercados emergentes ha sido baja, sus ingresos han ido aumentando constantemente.

Los mejores desempeños de las firmas no estadounidenses dependen de la adopción y adaptación de las formas de gestión exitosas, así como de su mejora permanente. En ese escenario, la competencia se haría más aguda.

Datos cruciales: 

En 2009 el valor de las empresas estatales de la lista de las diez mejores era de $3.7 billones de dólares, este total ha caído a $1.5 billones de dólares.

Participación estadounidense de las empresas más grandes del mundo (top 10), 2000-2013, (porcentaje).

Las diez compañías más grandes del mundo por valor de mercado 2009 y 2013 (miles de millones de dólares).

Participación estadounidense de las empresas más grandes del mundo (top 50), 2000-2013, (porcentaje).

Nexo con el tema que estudiamos: 

Recuperación de las empresas con sede en Estados Unidos, medida por el número en las primeras 10, primeras 50, valor de mercado y ganancias. Es significativo que las ventas no hayan sido usadas para este ejercicio, pues darían un panorama contrastado. Se reconoce la importancia crucial de la internacionalización de las empresas y se insiste sobre la necesidad de adoptar y mejorar el modelo de gestión "orientado por el mercado". Es preciso tomar en cuenta la resilencia de Estados Unidos que es capaz de crear nuevas grandes empresas e impulsar modelos de negocios exitosos. Llama la atención que en el caso de los competidores se machaca sobre el papel de gobiernos y estados, mientras que hay poco análisis sobre esos mismos actores para el caso de Estados Unidos. Destacar los casos de corrupción empresarial, tanto la cotidiana y personal, como la sistémica a la Enron. El argumento liberal insiste sobre el papel de la alta gerencia que "podría" adoptar modelos de gestión de mercado, como si no estuviera limitada por las condiciones de su sociedad.