Turkey's Syria move highlights America's tactical nukes in Europe. There are still 150 or so of the things

Cita: 

The Economist [2019], "Turkey's Syria move highlights America's tactical nukes in Europe. There are still 150 or so of the things", The Economist, London, 30 de noviembre, https://www.economist.com/europe/2019/11/28/turkeys-syria-move-highlight...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Noviembre 30, 2019
Tema: 
Armamento nuclear estadounidense compartido en Europa por el intercambio nuclear de la OTAN
Idea principal: 

Gracias al esquema de intercambio nuclear acordado entre los miembros de la Organización del Atlántico Norte (OTAN) existen 5 países en Europa que cuentan con estaciones nucleares, y varios aún mantienen las últimas 150 bombas nucleares restantes, Italia y Turquía  poseen la mayoría de ellas, con entre 60 y 70 cada uno, mientras el resto las tienen Bélgica, Países Bajos y Alemania. Aunque muchas de estas eran bombas tácticas debido a que son de menor tamaño, las restantes son bombas de caída libre B61 cuya capacidad va desde un tercio de kilotón hasta 170 kilotones, y a pesar de estar bajo la protección estadounidense, los pilotos europeos continúan realizando prácticas para lanzarlas.
 
Las bombas que más preocupan a militares estadounidenses son las que se encuentran en el sureste de Turquía, en Incirlik, a sólo unas horas de la frontera con Siria debido a que han sido motivo de alarma por haber sido tomadas en el intento de golpe de estado a Erdogan en 2016. Anteriormente Estados Unidos había pensado retirarlas durante otro golpe de estado en 1960 y al ocurrir un conflicto diplomático en 1975. Ante esto el país de las barras y las estrellas envió oficiales superiores para supervisarlas; aún así las bombas sólo pueden ser activadas mediante un código y se bloquean a falta de energía, lo que brinda oportunidad a Estados Unidos de poder intervenir en el lugar. Incluso se ha pensado en retirarlas y cambiarlas por bombas falsas, pero también se encuentra el riesgo de una crisis diplomática que lleve a Turquía al desarrollo de su propio programa nuclear como ya lo insinuó Erdogan en septiembre de 2019.

Esto abre debate sobre la presencia de las bombas B61 en Europa ya que otra de las razones de preocupación estadounidense es la necesidad de renovar las bases europeas donde se encuentran y que no cumplen con los estándares para el manejo de ese tipo de armamento. La principal oposición al intercambio nuclear se encuentra en Alemania donde a pesar del apoyo de Merkel, la coalición gobernante ha pedido que las bombas sean retiradas, y mantenerlas puede ser problemático ya que los actuales aviones de doble capacidad europeos están por desaparecer debido a que Bélgica, Países Bajos e Italia han comprado aviones F-35 a Estados Unidos mientras que Alemania se negó hacerlo en enero de 2019 por seguir el plan de construir junto con Francia la nueva generación de aviones de guerra. Aunque también existen otras dos opciones: comprar el antiguo avión estadounidense F-18 o regresar al Typhoon hecho en Europa. 

Algunos planificadores de OTAN temen que ante un ataque ruso a un aliado en el que lleve a cabo un ataque nuclear acotado para evitar un contraataque occidental, se emplee armamento táctico como misiles de largo alcance en lugar de armamento con la capacidad de destruir ciudades, siendo esta una razón por la que se mantienen las bombas nucleares tácticas. Sin embargo, ante dicho escenario, Estados Unidos enviaría bombarderos desde el otro lado del Atlántico o submarinos equipados con armamento de menor capacidad nuclear, por lo que la mayor garantía es brindada por las fuerzas estratégicas de Estados Unidos, Francia y Reino Unido y no por las bombas B61. Siendo entonces que el propósito del armamento nuclear brindado a Europa tiene un carácter más político que práctico, al buscar mantener un vínculo tangible entre ambas partes, sin embargo deja a Europa con escaso poder de decisión sobre el uso de tal armamento, lo que frente al deterioro de las relaciones entre Turquía y los aliados deja menos tranquilos a los europeos por los kilotones resguardados en Incirlik.

Datos cruciales: 

1. En 1950 Estados Unidos transportó sus primeras bombas nucleares a Reino Unido, y en las siguientes décadas llevó a Europa un total de 7 mil bombas nucleares en su punto más alto en 1971.

2. Barack Obama autorizó un programa por 10 mil millones de dólares para mejorar la puntería y extender la vida de las bombas tácticas en Europa, lo que tendrá un costo de 25 mil millones entre 2007 y 2046, alrededor de mil millones cada año. 

Nexo con el tema que estudiamos: 

Las relaciones peligrosas que caracterizan gran parte de la política exterior y militar de Estados Unidos, conduce a situaciones de alto riesgo geopolítico, como es el caso del arsenal nuclear asignado a Turquía y que hoy día se convierte en una interrogante frente a la volatilidad del régimen que encabeza Erdogan. Cada episodio relacionado con el armamento nuclear regresa a hecho básico sobre su manejo: solo su desaparición puede erradicar el peligro sistémico que representan: no hay "equilibrio" posible en este campo.