From muskets to missiles. The battle for the Middle Eastern arms market is heating up

Cita: 

The Economist [2020], "From muskets to missiles. The battle for the Middle Eastern arms market is heating up", The Economist, London, 13 de febrero, https://www.economist.com/business/2020/02/13/the-battle-for-the-middle-...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Miércoles, Febrero 13, 2019
Tema: 
Importaciones de armas en Medio Oriente.
Idea principal: 

El flujo de armas extranjeras a la península arábiga comenzó hace 150 años. Desde entonces, una combinación de inestabilidad crónica de la región y la riqueza petrolera ha impulsado la venta de armas: la mayoría de ellas provienen de Occidente, aunque han comenzado a aparecer otros proveedores.

Las exportaciones de armas rusas a Medio Oriente alcanzaron un máximo histórico de 13.7 mil millones de dólares en 2018, según Viktor Kladov de Rostec, la empresa estatal que maneja las exportaciones de las compañías de defensa de Rusia. La guerra en Siria, dijo Kladov, fue una oportunidad para exhibir las armas rusas. De igual forma, los países de Medio Oriente están interesados en construir sus propias industrias de defensa.

Poderes bélicos

Las empresas armamentísticas occidentales dependen principalmente de sus mercados nacionales para ventas y ganancias. Por ejemplo, las exportaciones representan menos de un tercio de los ingresos de Lockheed Martin, el mayor fabricante de armas del mundo. Sin embargo, el mercado de exportaciones global es rentable y cada vez más grande (ver Dato crucial 1), ya que los ingresos del extranjero ayudan a contrarrestar la baja en los presupuestos de defensa nacional y respaldan las gigantescas inversiones requeridas para grandes proyectos.

De 2014 a 2018, la región de Medio Oriente recibió un tercio de las exportaciones de armas del mundo, solo superada por Asia Pacífico. Según el Instituto de Estocolmo de Investigación para la Paz Internacional (SIPRI, por sus siglas en inglés) los países de la región de Medio Oriente importaron 87% más armas entre 2014 y 2018 que en los cinco años anteriores. En 2018, Arabia Saudita gastó 68 mil millones de dólares en equipo militar, mientras que Emiratos Árabes Unidos estuvo en el séptimo lugar en la lista de los mayores compradores de armas y Qatar y Omán llegaron al top 20.

Los fabricantes de armas de Estados Unidos, cuyo mercado interno es responsable de 36% del gasto mundial en defensa, dominan la industria: 12 de las 20 empresas de defensa más grandes del mundo son estadounidenses. La industria estadounidense también representó 36% de las exportaciones mundiales de 2014 a 2018, según SIPRI (ver Dato crucial 2).

La mayor parte del gasto en armas de los países de la región de Medio Oriente se destina al poder aéreo. Comprar, armar y mantener aviones de combate es costoso y representa casi dos tercios de las exportaciones mundiales en la última década. Arabia Saudita ha acumulado la octava flota de aviones de combate más grande del mundo (ver Dato crucial 4).

Por otro lado, gracias a los tratados internacionales de armas firmados por Estados Unidos, este país no puede exportar misiles balísticos, ciertos de misiles de crucero ni drones armados. Mientras que China, que se ha mantenido alejada de estos pactos, no enfrenta tales restricciones, convirtiéndose en uno de los mayores exportadores de armas del mundo.

Libélulas

Rivales estratégicos como India (el segundo mayor importador de armas del mundo detrás de Arabia Saudita) no importan productos chinos. Sin embargo, los fabricantes chinos de armas están haciendo incursiones en África y Medio Oriente, especialmente con drones armados: aunque éstos no son tan avanzados como los estadounidenses, pueden ser igual de efectivos. En 2018, Emiratos Árabes Unidos utilizó un avión no tripulado chino (que cuesta la cuarta parte de uno estadounidense) para matar a un líder rebelde hutí en el vecino Yemen, donde está luchando contra una insurgencia en coalición con Arabia Saudita.

El dron Wing Loong II, fabricado por Chengdu Aircraft Industry Group compite con el dron Predator construido por la empresa estadounidense General Atomics. Por esa razón, Donald Trump ha tratado de aligerar las restricciones a las exportaciones de los modelos estadounidenses.

Como China, Rusia ofrece tecnología barata y sin condiciones, en comparación con la estadounidense. Las empresas rusas aún no han entrado en el lucrativo mercado del Golfo Pérsico. Sin embargo, han estado suministrando productos más destructivos a Egipto (ya que Estados Unidos negó la exportación de armas después del golpe militar en 2013). El gobierno ruso dice que está en conversaciones para vender los aviones de combate su-35 Sukhoi a los Emiratos Árabes Unidos. Los saudíes están discutiendo la adquisición de sistemas de misiles antiaéreos S400 fabricados por la corporación rusa Almaz-Antey. Cuando Turquía (un aliado de la OTAN) acordó comprar los S400 a los rusos, Estados Unidos reaccionó negándose a vender los misiles F-35.

Las empresas rusas y chinas también parecen estar a punto de beneficiarse del embargo de armas que algunos países de Europa (Alemania, Canadá y Gran Betaña) han impuesto a Arabia Saudita por su participación en la guerra en Yemen y el asesinato de Jamal Khashoggi.

Finalmente, el artículo dibuja otra amenaza al dominio occidental en el mercado de las armas: el crecimiento de las industrias de armas en los países importadores. Australia, Pakistán, Corea del Sur y Turquía han comenzado a desarrollar empresas de defensa nacional, para lo cual están incrementando el presupuesto y están buscando ejecutivos y expertos en el extranjero.

Datos cruciales: 

1. El Instituto de Estocolmo de Investigación para la Paz Internacional estima el mercado global de armas en 100 mil millones de dólares en 2018.

2. Los países del Medio Oriente importaron más de la mitad de las exportaciones estadounidenses entre 2014 y 218, 60% de las exportaciones británicas, 44% de las francesas y 25% de las alemanas. Además, en 2018 Medio Oriente contribuyó con 3 600 millones de dólares, o alrededor de 7%, a los ingresos de Lockheed Martin; mientras que Raytheon realizó 15% de sus ventas totales en la región, incluyendo el norte de África con 4 mil millones de dólares.

3. Gráfica. Los caballeros árabes en brillantes armaduras. La gráfica muestra la importación mundial de armas por región y el tipo de armas importadas por Arabia Saudita.

-Por región, en el lapso de tiempo de 2014 a 2018: Asia Pacífico 40.0%; Medio Oriente 35%; Europa 14%; África 7.8% y América 6.2%.

-En Arabia, en el lapso de tiempo de 2014 a 2018: sector de la aéreo 53%; vehículos armados 16.4%; misiles 15.5%; otros 15.2%.

4. En 2011, Arabia Saudita firmó un contrato para 84 nuevos cazas F-15 y mejoras a 70 aviones existentes con un valor de 24 mil millones de dólares con Boeing y sus proveedores (Raytheon y Bae Systems). Bae vendió 72 aviones Typhoon al mismo país en 2007 por alrededor de 7 mil millones de dólares. Asimismo, el país ha adquirido sistemas antimisiles de Lockheed Martin y Raytheon.

Nexo con el tema que estudiamos: 

La nota ilustra el creciente y exitoso mercado global de armas. De esta manera se puede analizar cómo la competencia en este ámbito afectará a las empresas occidentales, ya que las empresas chinas y rusas se perfilan para ser competitivas; por otro lado, se manifiesta una posible creación de una industria bélica domésticas en los países de la región de Medio Oriente, lo cual, aunado a la competencia china y rusa, pone en jaque el monopolio de las corporaciones europeas y estadounidenses.