Green tomorrow. Why every Norwegian ecowarrior has 200,000 petrodollars

Cita: 

The Economist [2020], "Green tomorrow. Why every Norwegian ecowarrior has 200,000 petrodollars", The Economist, London, 8 de febrero, https://www.economist.com/europe/2020/02/08/why-every-norwegian-ecowarri...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Febrero 8, 2020
Tema: 
Noruega sigue dependiendo en gran medida del petróleo, a pesar de los esfuerzos por despetrolizar la economía
Idea principal: 

En Noruega existe una costumbre de trabajo comunitario llamada dugnad que mantiene y promueve la limpieza y el orden. Recientemente, bajo esta tradición se intenta impulsar un festival al estilo Burning Man combinando empresas de tecnología con objetivos ecológicos.

La juventud noruega quiere reducir la dependencia de su economía al petróleo por lo que un nuevo modelo de empresas o startups están surgiendo en Oslo, ayudadas por generosos subsidios del gobierno. Estas startups que tienen nombres como “Douchebags” y “Monster” y sus oficinas a la moda intentan desplazar al sector petrolero. Logrando su objetivo en una pequeña proporción, ya que las empresas petroleras están teniendo problemas para reclutar talentos.

Aún con el esfuerzo que el propio Estado noruego en conjunto con las llamadas startups, en un futuro cercano la economía de Noruega seguirá dominada por el petróleo. El petróleo ha transformado al país desde que se descubrió el campo petrolero Ekofisk en el Mar del Norte en 1969, desde entonces, Noruega es uno de los mayores exportadores de petróleo en el mundo. Johan Sverdrup, un campo petrolero recién hallado al norte del país podría hacerle ganar a Noruega unos 100 mil millones de dólares en los próximos 50 años.

Sveinung Rotevatn, el recién nombrado ministro de clima y medio ambiente admite que Noruega es una paradoja: mientras que es uno de los líderes en el uso de energías y tecnologías renovables, es también un gigante de los combustibles fósiles.

En 1990 se estableció un fondo de riqueza soberana con el objetivo de prepararse a un futuro post-petróleo, sin embargo en noviembre de 2019 se informó que este vendería todas sus acciones -valuadas en mil millones de dólares- en compañías dedicadas a la exploración de petróleo y gas. En este sentido, ¿en Noruega se está haciendo realmente lo suficiente para dejar de depender del petróleo? "El gobierno está profundamente arraigado en las viejas industrias, pero no ha mostrado interés en invertir directamente en empresas tecnológicas" dice Trond Riiber Knudsen, director ejecutivo de trk, una empresa de inversión con sede en Oslo. En efecto, Noruega ejerce un control estatal de empresas de telecomunicaciones, fabricantes de diversos productos como fertilizantes y aluminio, incluso de bancos, pero no de la industria tecnológica.

De acuerdo con Ivar Horneland Kristensen, jefe de la federación de comercio y servicios, Noruega enfrenta cuatro desafíos: necesita reducir su enfoque en el petróleo y el gas, aumentar su productividad mediante el uso de la tecnología, descarbonizar la economía para cumplir con los objetivos del Acuerdo de París sobre el cambio climático y crear 25,000 empleos al año para que los trabajadores petroleros despedidos sigan trabajando de manera remunerada.

"No hay futuro para el petróleo", insiste Mathias Mikkelsen, el CEO de Memory de 29 años, una startup que desarrolló una aplicación para rastrear el tiempo que una persona le dedica a su trabajo. No es para menos que este empresario afirme esto, ya que Memory es una de las nuevas empresas beneficiadas de la política de reducción de la dependencia de la economía hacia el petróleo.

Datos cruciales: 

1. Los hidrocarburos son fundamentales para la economía noruega. Se estima que representan cerca del 50% de sus exportaciones y 19% de su PIB.

2. El fondo de riqueza soberana del país -que proviene directamente de la industria petrolera- asciende a más de 200 mil dólares por ciudadano, por lo que es difícil imaginar la ruptura de dependencia hacia los hidrocarburos.

3.El 20% de los noruegos dependen del bienestar social, sin contar las pensiones.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Noruega es uno de los muchos países que dependen directamente del petróleo a pesar de los grandes esfuerzos estatales y de la ciudadanía por emprender otros caminos alejados de una de las industrias más contaminantes del mundo, sin embargo, la dependencia generada hacia este hidrocarburo no es fácil de superar.
La creación de empresas de tecnología con un fuerte capital estatal es una buena opción para impulsar la economía desde otras esferas, aún así la crisis civilizatoria que desencadenó el uso excesivo de hidrocarburos avanza a niveles tan vertiginosos que no es posible afirmar que se hará una transición efectiva antes de que el nivel de daño al ambiente sea irreversible.