China Is Collecting DNA From Tens of Millions of Men and Boys, Using U.S. Equipment

Cita: 

Wee, Sui-Lee [2020], "China Is Collecting DNA From Tens of Millions of Men and Boys, Using U.S. Equipment", The New York Times, New York, 19 de junio, https://www.nytimes.com/2020/06/17/world/asia/China-DNA-surveillance.html

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Viernes, Junio 19, 2020
Tema: 
China intenta construir una gigantesca base de datos genéticos de millones de hombres y niños chinos
Idea principal: 

Sobre el autor

Sui-Lee Wee es corresponsal en Beijing para el New York Times. Wee ha cubierto China durante casi una década, durante 8 años fue corresponsal de Reuters desde Singapur, Hong Kong y Beijing. Originaria de Singapur, tiene una licenciatura en comunicación por la Universidad Tecnológica de Nanyang y, gracias a una beca del Wall Street Journal, cursó una maestría en periodismo económico y de negocios por la Universidad de Nueva York.


A través de todo el país, la policía en China está recolectando muestras de sangre de niños y hombres para construir el mapa genético de sus 700 millones de varones, lo que le daría a Beijing una nueva y poderosa herramienta para fortalecer la vigilancia estatal de alta tecnología que el gobierno chino ha venido desarrollando.

Según un estudio publicado a mediados de junio por el Australian Strategic Policy Institute, un organismo de investigación, desde finales de 2017 por todo el país las autoridades chinas han tomado muestras de ADN para construir una gigantesca base de datos genéticos con la que será posible rastrear a la parentela masculina de un hombre usando solo una muestra de su sangre, saliva u otro material genético.

Una compañía estadounidense está ayudando al gobierno chino en esta labor. Thermo Fisher, con base en Massachusetts, ha proveído de kits de pruebas a la policía china. Aunque ha recibido críticas de parte de algunos congresistas estadounidenses, la compañía ha defendido su negocio.

Aunque China ya usa datos genéticos para vigilar a ciertas minorías étnicas y otros grupos, el proyecto representa una escalada en los esfuerzos del gobierno de usar esta información para controlar a su población y se suma a la creciente y sofisticada red de vigilancia que la policía está desplegando en todo el país, que incluye cada vez más sofisticadas cámaras de vigilancia, sistemas de reconocimiento facial e inteligencia artificial.

Mientras la policía china considera que la base de datos es necesaria para combatir el crimen, y señala que la toma de muestras se realiza de forma voluntaria; algunos funcionarios chinos, así como defensores de los derechos humanos fuera de China, han advertido que dicha base de datos atenta contra la privacidad de los ciudadanos y podría usarse para castigar a los familiares de activistas y disidentes, mientras que los ciudadanos, al vivir en un Estado autoritario, prácticamente no tienen ninguna posibilidad de rechazar la recolección de su información genética. De forma inusual, el programa está levantando una fuerte oposición al interior de China; sin embargo, ya está siendo aplicado en las escuelas de la costa del sur del país.

Rastreando a los varones chinos

Según las estadísticas, son los varones los que cometen más crímenes, es por ello que el gobierno chino está recabando muestras de ADN de hombres y niños. El origen de esta campaña se remonta a la región de Mongolia Interior, donde durante tres décadas la policía investigó el homicidio y la violación de 11 mujeres y niñas. Con la intención de resolver estos crímenes, las autoridades recolectaron 230 000 huellas digitales, más de 100 000 muestras de ADN y se ofreció una recompensa de 28 000 dólares. Finalmente, en 2016, arrestaron a un hombre por soborno, pero analizando su información genética fue relacionado con el homicidio de una mujer en 2005, el imputado confesó sus crímenes y fue ejecutado posteriormente.

La captura y la resolución de este caso impulsó a los medios estatales a demandar la creación de una base de datos genéticos masculinos. Entre 2014 y 2016, la policía de la provincia de Henan demostró que era posible, después de acumular muestras de 5.3 millones de hombres, aproximadamente el 10% de la población masculina de la provincia. Luego, a finales de 2017, el Ministerio de Seguridad Pública, a cargo de la policía, reveló sus planes para crear una base de datos genéticos a nivel nacional.

Si bien, China ya posee la mayor base de datos genéticos, con 80 millones de perfiles según medios estatales, el acopio de estos datos estuvo centrado en sospechosos de crímenes y grupos potencialmente desestabilizadores, como trabajadores migrantes y grupos étnicos minoritarios. El proyecto de compilar una base de datos genéticos nacional representa una expansión de estos esfuerzos iniciales.

Según las estimaciones del Australian Strategic Policy Institute, las autoridades chinas buscan recabar los datos genéticos de entre 35 a 70 millones de hombres y niños, lo que representa entre el 5 y 10% de la población masculina. No se necesitan tomar muestras a cada hombre, debido a que una personas puede desbloquear la información genética de sus parientes masculinos.

Aunque el New York Times no recibió respuesta a las preguntas que envió al Ministerio de Seguridad Pública, a menudo los funcionarios locales publican los resultados de su muestreo. En el condado de Donglan, en la región de Guangxi, por ejemplo, la policía asegura haber recopilado más de 10 800 muestras, cubriendo casi 10% de la población masculina; mientras que en el Yijun, provincia de Shaanxi, la policía recolectó 11 700 muestras, lo que representa 25% de la población masculina.

Para estimar las ambiciones del proyecto, el Australian Strategic Policy Institute analizó las tasas de muestreo en 10 condados y distritos, y las órdenes de compra de kits de prueba de ADN de 16 jurisdicciones más. Aunque gran parte de la demanda de estos kits fue satisfecha por compañías chinas, algunos contratos fueron para Thermo Fisher, el fabricante de equipos de pruebas genéticas con sede en Massachusetts. Esta compañía ha vendido sus kits de prueba diseñados para buscar los marcadores genéticos especificados por el Ministerio de Seguridad Pública en al menos nueve condados y ciudades, y otro fue diseñado específicamente para recopilar la información genética de grupos étnicos minoritarios de China, incluidos uigures y tibetanos.

Si bien, los equipos ofrecidos por la compañía también pueden ayudar a las autoridades a encontrar enfermedades crónicas entre su población, para muchos, el equipo de la compañía puede ser una herramienta fundamental para el control social. Debido a este tipo de preocupaciones la compañía declaró que dejaría de vender equipo a las autoridades a las autoridades de la provincia de Xinjiang, en el noroeste del país, donde la policía recolecta la información de la minoría Uigur con fines de control social.

Privacidad y consentimiento

A pesar que las autoridades chinas aún están construyendo la base de datos nacional, esta ya está siendo usada para aumentar la vigilancia sobre sus ciudadanos. En marzo, según el Australian Strategic Policy Institute, funcionarios del municipio de Guanwen, en Sichuan, declararon que las muestras de sangre masculina recolectadas se utilizarían para reforzar el proyecto Sharp Eyes de forma local. Este proyecto es un programa de vigilancia gubernamental que alienta a informar sobre sus vecinos a la gente del campo.

Según un portavoz de Anke Bioengineering, una compañía de biotecnología con sede en la provincia de Anhui, la compañía está utilizando la base de datos de ADN masculino para construir un “Skynet de ADN”. Skynet es el sistema policial de China que combina la videovigilancia y el big data.

Sin embargo, el programa nacional de recolección de ADN masculino se ha encontrado con una inusual oposición en China, principalmente debido a que no está regulado por la ley y muchos funcionarios temen que el público reaccione negativamente a una amplia base de datos que contenga sus secretos genéticos y sus lazos familiares. En una sesión del Parlamento en marzo, dos delegados del órgano asesor político de China propusieron regular la recolección de ADN para proteger los derechos de los usuarios de manera oportuna.

También Liu Bing, el subdirector del Instituto de Ciencias Forenses del Ministerio de Seguridad Pública, advirtió en 2015 en el diario forense del ministerio que la recolección de muestras genéticos representa “políticas inadecuadas” que podrían causar inestabilidad social en una ciudadanía cada vez más consciente de sus derechos. Es por ello que las autoridades se han movido con discreción, tomando la mayoría de las muestras en las regiones rurales, donde hay una menor comprensión de las implicaciones del programa. Sin embargo, los funcionarios locales de las áreas rurales se han mostrado orgullosos de su trabajo y, en la provincia de Dongguan, han mostrado fotos de niños de una escuela primaria formados esperando a que un funcionario les tome sus muestras genéticas.

Para muchos activistas de derechos humanos, la ciencia genética le dará a las autoridades chinas un poder sin precedentes para enjuiciar a las personas que el régimen considera indeseables, pues ahora se podrá citar su ADN para dar a sus acusaciones más credibilidad, y se podrá "plantar" evidencia.

Nexo con el tema que estudiamos: 

Si bien, los avances científicos en áreas de “punta” como la ingeniería genética han traído un conjunto de beneficios a la humanidad, al mismo tiempo han habilitado nuevas formas de control social por parte del Estado y el capital. El sistema Skynet que está desarrollando China para el control de sus ciudadanos ahora busca articular los datos genéticos de su población con los sistemas de reconocimiento facial, big data y de geolocalización, ya operantes. Debido a ello es menester darle seguimiento al desarrollo de este sistema de vigilancia y control social ya que pudiera representar un modelo para otros Estados.