China Brings Moon Rocks to Earth, and a New Era of Competition to Space

Cita: 

Myers, Steven Lee y Kenneth Chang [2020], "China Brings Moon Rocks to Earth, and a New Era of Competition to Space", The New York Times, New York, 16 de diciembre, https://www.nytimes.com/2020/12/16/science/china-moon-mission-rocks.html

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Miércoles, Diciembre 16, 2020
Tema: 
Las exploraciones espaciales recientes de China son un parteaguas para el desarrollo de la hegemonía mundial actual y futura
Idea principal: 

Steven Lee Myers es periodista y ha cubierto notas sobre la Casa Blanca, el Pentágono y la Secretaría de Estado en Washington.

Kenneth Chang, reportero científico, que cubre temas sobre química, geología, física, nanotecnología y pestes, entre otros.


Algunos analistas consideran que las expediciones de China hacia la luna se demoraron. Sin embargo, en diciembre de 2020 una cápsula china aterrizó en la Tierra y lo hizo cargada de material lunar. Esta expedición pone a China de lleno en la carrera espacial y será un parteaguas en las exploraciones espaciales, pues detonará una competencia por los recursos del espacio.

Chang’e-5, la nave espacial que viajó a la luna, regresó con casi 2 kilogramos de material lunar que extrajo de una llanura volcánica. La expedición de Chang'e-5 demostró el gran interés que la nación asiática tiene en el espacio, así como sus crecientes capacidades tecnológicas.

En 1960 y 1970, Estados Unidos y la Unión Soviética eran quienes lideraban la supremacía en el espacio. En la actualidad, parece que la disputa es más intensa y que lo que está en juego es más valioso, tanto en términos económicos como simbólicos.

El gobierno chino tiene intenciones de explorar el sistema solar y, al igual que Estados Unidos, pretenden instalar una base lunar que permita explorar y explotar los recursos disponibles en el cuerpo celeste.

Brendan Curry, de la Sociedad Planetaria, manifestó que China no ha declarado de manera oficial querer “remplazar a Estados Unidos como líder en el espacio”. No obstante, es claro que pretende ser un actor importante.

La Administración Nacional del Espacio de China emitió un comunicado donde manifestó que la cápsula con las rocas lunares aterrizó en Mongolia. Debido a que hubo algunas dificultades de aterrizaje, fue necesario transportar de inmediato las rocas a las instalaciones pertinentes para confirmar que se encuentran en buenas condiciones.

El espacio es un terreno que cada vez llama más la atención de Estados Unidos y China. En los años más recientes, los avances de China llevaron a la administración de Donald Trump a la creación de una Fuerza espacial. No obstante, las capacidades de China aún están lejos de las de Estados Unidos.

Mike Pence, vicepresidente de Estados Unidos declaró que las intenciones de Estados Unidos en regresar a la luna son altas ya que “China pretende apoderarse del terreno y convertirse en la nación espacial preeminente del mundo”.

Por otro lado, es posible que en el futuro la exploración espacial ya no sólo sea atractiva para las agencias nacionales, sino que empresas espaciales privadas también desarrollen planes en el espacio. Por ejemplo, Elon Musk, fundador de SpaceX, declaró que, “para cuando la NASA o los astronautas chinos lleguen a la luna, él enviará gente a Marte”.

Podría pensarse que China y Estados Unidos trabajen de manera conjunta. Sin embargo, esto no es posible, ya que en 2011 se modificó la ley para prohibir la cooperación de la NASA con las agencias chinas. El impulsor de ese cambio legislativo fue Frank Wolf, ex congresista republicano, quien castigó a China “por su historia de violaciones a los derechos humanos y para proteger la tecnología aeroespacial estadounidense”. Esta sanción podría afectar a Estados Unidos, pues podría no tener acceso a las rocas que el Chang’e-5 recolectó y que además, son de una región distinta a la que Estados Unidos exploró en su momento.

Jim Bridenstine, administrador de la NASA, dijo que la NASA podría servir como un medio de diplomacia para fomentar la cooperación internacional con China. Sin embargo, habrá que esperar para conocer los planes que la administración entrante de Joe Biden tiene para la NASA.

Por su parte, Xi Jinping, presidente de la República Popular de China “ha hecho del espacio una parte central para crear una China más grande y más poderosa”. Según el artículo, los avances de China se deben a su planeación estratégica de largo plazo. Mientras que la NASA cambia periódicamente de rumbo y sus proyectos son inestables, China se ha apegado a sus planes y ha cumplido de manera puntual con sus objetivos. Por ejemplo, la misión china Chang’e comenzó en 2000, cuando la administración de George W. Bush declaró que astronautas estadounidenses volverían a la luna en 2020. No obstante, el gobierno de Obama canceló las expediciones lunares para darle prioridad a las misiones a Marte.

A pesar de la supuesta urgencia de la administración de Trump por regresar a la luna, China se ha tomado su tiempo y parece que incluso tiene planes a largo plazo. Tras la reciente y exitosa misión, el país asiático tendrá que invertir en infraestructura y conocimiento si quiere encabezar las exploraciones y explotaciones espaciales.

Para China, la luna no sólo representa una exposición de su capacidad tecnológica o un orgullo nacional, sino que también funge como una posible base robótica y/o humana que permita la exploración espacial.

Zhang Yuli, teniente general y ex vicecomandante del programa espacial de China declaró para The New People´s Daily que, “el área entre la Tierra y la luna será un campo amplio para la expansión del espacio vital humano”. Por su parte, Bao Weimin, alto funcionario de la Corporación de Ciencia y Tecnología Aeroespacial de China, manifestó que el espacio cislunar (el espacio entre la Tierra y la luna) podría ser una zona económicamente activa de gran valor para el país (Ver dato crucial 1). “No se trata sólo de mostrar su tecnología. [China] Está comenzando a articular aspiraciones económicas en términos de los recursos que existen” dijo el Dr. Goswami.

Japón no quiere quedarse atrás en exploraciones espaciales, pues el pasado diciembre de 2020 su nave Hayabusa2 aterrizó en la Tierra tras seis años de expedición. Según la agencia espacial japonesa la nave regresó con “una gran cantidad de partículas” de componentes del sistema solar que serán analizadas por especialistas.

China es un gran rival para Estados Unidos y Rusia, pues también se sabe que el país asiático “planea construir una estación espacial en órbita alrededor de la Tierra” y ha invitado a astronautas de diversas nacionalidades a ser parte de su equipo. Si el plan se concreta, colocaría directamente a China en competencia con la Estación espacial internacional que es comandada por Estados Unidos y Rusia.

La sanción que Estados Unidos tiene contra China podría ser motivo de decepción para las y los científicos del país norteamericano, pues ello impediría que se realicen comparaciones entre las rocas lunares que China extrajo y las que en su momento Estados Unidos obtuvo como muestra.

Esas rocas "representan una era completamente diferente de la historia lunar y definitivamente ayudarían en nuestra búsqueda para comprender la evolución de nuestra luna", escribió Clive R. Neal, profesor de ingeniería civil y ciencias geológicas en la Universidad de Notre Dame. Desafortunadamente, todo indica que no será posible estudiar esas rocas para las y los científicos estadounidenses.

Datos cruciales: 

1. El espacio cislunar -es decir, el área que se encuentra entre la Tierra y la luna- podría generar $10 billones [trillion] de dólares para la economía china.

Nexo con el tema que estudiamos: 

El estudio de la apertura hacia nuevos territorios para su exploración resulta de interés ya que como hemos atestiguado, ello implica modificaciones económicas, sociales, políticas y culturales. La expansión de estudio hacia el espacio es particularmente interesante ya que es un indicativo de que los recursos disponibles en la Tierra ya no son suficientes para satisfacer las necesidades del capitalismo. Por lo tanto, es importante identificar y destacar a los actores que están liderando las investigaciones y también lo que ello implica. Pues, como es el caso de la nota, entre Estados Unidos y China no hay buena relación político-comercial, lo que podría desencadenar una serie de conflictos y ya no sólo en la Tierra, sino también en (y por) el espacio.