Cade Metz es corresponsal de tecnología y cubre inteligencia artificial, automóviles sin conductor, robótica, realidad virtual y otras áreas emergentes. Anteriormente escribió para la revista Wired.

Karen Weise es corresponsal de tecnología con sede en Seattle y cubre Amazon y Microsoft. Su trabajo tiene como objetivo ayudar a los lectores a comprender mejor dos de las empresas más poderosas de Estados Unidos y su creciente influencia en la sociedad.

ChatGPT es un nuevo chatbot, un software capaz de tener una conversación de manera natural, responder preguntas simples y codificar textos, que está causando revuelo entre compañías de renombre, gracias a su avanzada tecnología. Este software fue diseñado por la compañía Open AI, financiada principalmente por Microsoft. Desde su fundación como organización con fines de lucro ha sido financiada principalmente por Microsoft, a cambio del acceso a toda la tecnología desarrollada por ésta (Dato crucial 1).

Chatbot es capaz de escribir poesía y responder preguntas sobre casi cualquier tema. Está basado en GPT-3 y GPT-3.5, programaciones anteriores capaces de generar textos, hacer publicaciones, artículos y noticias por sí mismo, incluso codificar una computadora. Se espera sea capaz de mejorar a Alexa y Siri, y con esto Microsoft puede ampliar su gama de productos.

Open AI está trabajando en una tecnología aún mejor, GPT-4 que podría ser añadida a Microsoft, aunque se han abstenido a dar detalles o mencionar algo al respecto (Dato crucial 2).

Además de trabajar en estas tecnologías Open AI, comenzó a trabajar con DALL-E una tecnología que genera imágenes a partir de la descripción proporcionada por sus usuarios. Por otro lado Microsoft ofreció una herramienta de programación llamada Github(Copilot); la cual sirve para adelantar líneas de código de programación a medida que los programadores escribían, asemejando a un auto corrector pero a nivel programación.

Aún tiene muchísimos detalles por mejorar, tienen fallas en cuanto a programación; producen información errónea, discursos de odio e imágenes ofensivas. Hace 5 años salió al mercado Tay, un chatbot que usaba lenguaje racista, xenófobo y obsceno. Tuvieron que descontinuarlo al poco tiempo, es por eso que se hacen más filtros.