Casi mil granjas de cerdo en Yucatán producen carne para EEUU, Canadá y Asia

Cita: 

Pascacio, Jeny [2023], "Casi mil granjas de cerdo en Yucatán producen carne para EEUU, Canadá y Asia", Avispa Midia, 2 de octubre, https://avispa.org/casi-mil-granjas-de-cerdo-en-yucatan-producen-carne-p...

Fuente: 
Otra
Fecha de publicación: 
Lunes, Octubre 2, 2023
Tema: 
Los efectos de la porcicultura en la Península de Yucatán.
Idea principal: 
    Jeny Pascacio es una reportera que se centra en temas de derechos humanos y escribe en un sitio web llamado Avispa Midia y en el periódico El Heraldo de México.

    La Península de Yucatán tiene una ubicación estratégica, que ha influido positivamente en la expansión de la industria porcina. En dicho estado se encuentra la mayor cantidad de granjas a partir de que la porcicultura fue impulsada por el gobierno mexicano desde la década de los setenta, siendo el Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN) en los noventa la que generó un crecimiento potencial en la producción de cerdo (datos cruciales 1 y 2).

    Organizaciones y expertos han hecho investigaciones que coinciden en que un número importante de granjas llevan sus actividades fuera del marco legal y sin una regulación como la que considera la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) (datos cruciales 3 y 4). Lo interesante es que, la mayor parte de la producción agrícola de Yucatán se exporta a países como Japón, Corea del Sur, Hong Kong, Estados Unidos y Canadá.

    Zonas kársticas

    La organización internacional de protección animal Mercy For Animals hizo una investigación sobrevolando instalaciones de Yucatán y se percataron de la deforestación propiciada por las mega granjas industriales hechas en selvas tropicales. Además, identificaron evidencia del colapso ambiental por la presencia de estructuras con animales y millones de cantidades de desecho animal que contaminan el suelo, aire y agua, debido a que las instalaciones de biodigestores se ven rebasados por las grandes cantidades de desecho. Expertos y organismos apoyan esta idea porque consideran grave el impacto ambiental originado por las actividades en las granjas pues fomentan la deforestación de la selva, la contaminación del suelo y la emisión de gases de efecto invernadero (datos cruciales 5-7).

    Hallazgos

    La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) hizo un estudio sobre la calidad de agua, donde encontraron elevadas concentraciones de E. Coli, lo que indica contaminación difusa de excremento de seres vivos endotérmicos. Los ácidos nucleicos como la urea y el ácido úrico como materia orgánica están sujetos al consumo por parte de microrganismos, los cuales lo procesan y transforman el nitrógeno presente en amoniaco, al cual se le conoce como nitrógeno amoniacal (dato crucial 8). Por otro lado, también identificaron en la misma zona contaminación con fósforo y cantidades importantes de amoniaco y ácido sulfhídrico considerados contaminantes atmosféricos en tres granjas de Yucatán.

    La peste que impide vivir

    Las afectaciones no sólo son ambientales, también se identifican las que abordan el despojo de tierras y abuso de los derechos de quienes habitan en la región o de los que buscan defender la biodiversidad, generando problemáticas en la salud, formas de organización social y el estilo de vida de las comunidades. Tal como ocurre con la comunidad maya de Siltipech, en el municipio de Izamal, Yucatán, donde los habitantes llevan una lucha desde 2021 con la empresa Kekén, debido a la construcción de una mega granja con 49 mil cerdos y que ha dañado la salud de la población manifestada en la piel y problemas estomacales.

    Mercy For Animals ha hecho un llamado de urgencia a las autoridades mexicanas competentes como la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), Procuraduria Federal de Proteccion al Ambiente (Profepa) y Semarnat para que restrinjan los permisos, supervisen y de ser necesario clausurar a la industria que no cumpla con los requerimientos legales. Por otro lado, la Doctora en Geografía Ambiental de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Yameli Aguilar Duarte considera lamentable y preocupante que las autoridades gubernamentales apoyen cada vez más a la industria porcina.

    Otras contaminaciones

    Para Salvador Castell, fundador de la organización Va por la Tierra dijo ante Avispa Media que la situación crítica de Yucatán por la contaminación en el agua incluye a toda la producción pecuaria. Porque el uso de agroquímicos son tóxicos y cancerígenos, además de que se usan sin ningún marco legal. Por eso, Castell considera no ignorar a todas las actividades que generan impactos ambientales, como la industria textil y cervecera.

Datos cruciales: 

    1) La organización internacional de protección animal Mercy For Animals reportó la existencia de 872 granjas de cerdos en la Península de Yucatán, donde en muchas de ellas existen hasta 100 mil cerdos.

    2) Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el promedio de producción de carne en Yucatán pasó de 17.622 toneladas entre los años de 1984-1992 a 38.278 entre 1993 y 1994, lo que significa que se sació 95 % de la demanda regional. Además, en 2019 la producción de carne se incrementó 4.5% anual, cifra superior a las reportadas en Sonora (2.6%) y Jalisco (1.7%).

    3) A principios de 2023, se realizó el Dictamen Diagnóstico Ambiental de la Actividad Porcícola de Yucatán, publicado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), donde se identificaron 507 coordenadas de posibles granjas en el estado de Yucatán. Fueron localizadas en 83 de los 106 municipios, pero con mayor presencia en Mérida, Izamal, Tizimín y Acancéh, Tetiz, Ticul, Telchac, Tixkokob y Motul. Por lo tanto, las comunidades donde hay una mayor densidad de granjas son: Conkal (27), Telchac (22), Homún (15), Tizimín (15), Umán (15), Chicxulub (15), Tixkokob (14), Tetiz (14), Izamal (12), Ticul (11).

    4) En 2020 Greenpeace, una organización no gubernamental ambientalista e internacional, documentó la existencia de 257 granjas. Donde 47% se localizó dentro de las áreas prioritarias para la conservación de la biodiversidad.

    5) Yameli Aguilar Duarte, Doctora en Geografía Ambiental de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), considera imposible que las zonas kársticas puedan soportar las cantidades y volúmenes de producción de la industria porcina, ya que el cerdo produce cuatro veces más residuos que un humano.

    6) La Semarnat identificó 205 títulos de aprovechamiento de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) relacionados a la actividad de granjas porcícolas que corresponden a 343 permisos de descargas, según el Organismo de Cuenca de la península de Yucatán.

    7) De las 507 coordenadas de posibles granjas en Yucatán, 60% de estas granjas no se logró identificar algún título de concesión o permiso de descarga de aguas residuales, reflejando que 30% cuentan con algún título.

    8) El estudio se hizo en un muestreo de 22 pozos de agua potable y 20 cenotes para analizar la calidad del agua. En la zona sur y este de Mérida se identificó 3 veces la concentración de Nitrógeno amoniacal en el agua subterránea.

Nexo con el tema que estudiamos: 

    La industria porcina tiene graves impactos ambientales, donde las autoridades mexicanas competentes han hecho caso omiso a los estudios y malestares de las comunidades que les han hecho saber. Las afectaciones que brindan las mega granjas repercuten en el medio ambiente y en el estilo de vida de las comunidades que viven cerca de dichas infraestructuras, afectando la salud y sus viviendas, situaciones también ignoradas por las actividades de las grandes empresas.