Breaking Bad: Big Ag mega-mergers in play

Cita: 

ETC Group [2015], Breaking Bad: Big Ag mega-mergers in play. ETC Communiqué No. 115, Ottawa, diciembre, http://www.etcgroup.org/sites/www.etcgroup.org/files/files/etc_breakbad_...

Fuente: 
Artículo científico
Fecha de publicación: 
Diciembre, 2015
Tema: 
Las mega-fusiones en los sectores de insumos agrícolas y sus impactos socioambientales
Idea principal: 

ETC Group se dedica a la investigación de asuntos socioeconómicos y ecológicos que rodean las nuevas tecnologías y que podrían tener impactos en los más pobres y más vulnerables del mundo.


El texto examina cuatro sectores de insumos agrícolas: semillas, pesticidas, fertilizantes químicos y maquinaria agrícola. Partiendo de dos interrogantes: ¿quién dominará la cadena alimentaria industrial? y esto ¿qué significado tiene para los agricultores, la soberanía alimentaria y la justicia climática?

Lo que se encuentra en juego.

BASF, Bayer, Dow, DuPont, Monsanto y Syngenta son las seis mayores corporaciones en la industria agroquímica, las cuales dominan los mercados de semillas y pesticidas mundiales. Estas empresas tienen como objetivo crecer aun más por medio de fusiones. Dichas empresas señalan al crecimiento poblacional, la creciente demanda de carne y la crisis climática como presiones para colocar el juego a su favor.

El destino de las seis empresas dominantes de fertilizantes y semillas está en juego. La protección de los activos de los participantes en la industria de fertilizantes se encuentra en manos de los negociadores del cambio climático por medio de la “agricultura climáticamente inteligente”(1).

Las cuatro empresas que controlan 56% de la industria de la maquinaria agrícola tienen el hardware de la robótica y están adquiriendo el software (datos masivos -Big Data- y la vigilancia por satélite). Estas empresas pretenden instalar un software de base biológica con semillas y pesticidas.

Las industrias de insumos agrícolas actualmente se encuentran más vinculadas que nunca, por ejemplo, Monsanto colabora con tres de las empresas de maquinaria agrícola más grandes del mundo: Deere & Co, CNH Industrial y AGCO.

El texto señala que, posiblemente, los mayores cambios a corto plazo serán visibles entre las empresas de semillas y plaguicidas, pero en el largo plazo e incluso en el mediano, los mayores cambios serán en el sector de maquinaria agrícola.

Políticas

Que los insumos agrícolas se concentren en pocas manos por medio de las mega-fusiones contiene la amenaza de debilitar la base del suministro de alimentos y se coloca en peligro los esfuerzos realizados por aumentar la resiliencia ante el cambio climático.

Para encaminarse hacia la soberanía alimentaria el mundo requiere de una transición a una configuración con nuevos innovadores que incluya a los pequeños productores e investigadores públicos.

Las seis grandes empresas disputarán el mercado bajo el disfraz de la “agricultura climáticamente inteligente” tratando de evadir las restricciones antimonopolio e intentando regular las nuevas tecnologías de alto riesgo, por ejemplo, la biología sintética.

Los gobiernos, a nivel nacional e internacional deben: 1) fortalecer sus reglamentos anti-monopolio para no permitir las mega-fusiones, 2) reconocer que el sistema de propiedad intelectual sofoca la innovación útil y retarda el progreso (p. 3).

Las regulaciones antimonopolio no se deben limitar únicamente a países como Estados Unidos y la Unión Europea, siendo que China, Brasil, India y Argentina figuran entre los 10 principales mercados de pesticidas y no pueden ser ignorados. Empresas, agricultores y consumidores en el sur global serán afectados de las mega-fusiones en las grandes empresas de la agricultura (p. 16).

Las seis grandes empresas

En 2013, con ingresos colectivos de más de 65 mil millones de dólares en agroquímicos, semillas y algunos elementos biotecnológicos (biotech traits), BASF, Bayer, Dow, DuPont, Monsanto y Syngenta controlaron: 75% del mercado mundial de agroquímicos, 63% del mercado de semillas comerciales y más de 75% de la investigación del sector privado de semillas / pesticidas (p. 4).

Cuando cuatro empresas controlan 40% del mercado, se calcula que hay un efecto contrario a la competencia y posibilidades de colusión. En los sectores de semillas, agroquímicos y maquinaria agrícola, sólo tres empresas concentran más allá de este porcentaje:

-Agroquímico: Syngenta (20%), Bayer CS (18%), BASF (13%) = 51%

-Semillas: Monsanto (26 %), DuPont (21%), Syngenta (8%) = 55%

-Maquinaria agrícola: Deere (25%), CNH (15%), AGCO (9%) = 49% (p. 4-5).

La industria China

El potencial de las mega-fusiones no se limita únicamente las seis empresas señaladas, las empresas chinas también pueden entrar en el juego. Syngenta se encuentra en conversaciones para fusionarse con la corporación estatal ChemChina. La importancia del país oriental radica en que es el tercer mayor mercado nacional de productos agroquímicos.

En 2011, ChemChina se convirtió en una gran empresa de pesticidas, suceso posible al adquirir a Makhteshim Agan Industries (de Israel), el séptimo fabricante de pesticidas a nivel mundial.

Otra empresa importante en China es la estatal COFCO, la cual actúa en el negocio de granos.

Por otro lado, en noviembre de 2015 un proyecto conjunto chino-coreano anunció planes para la construcción de una fábrica de clonación animal en Tianjin (en China). El objetivo es clonar 1 millón terneros al año. Esta producción animal involucrará una mayor demanda de granos (p. 6).

Fertilizantes

En los insumos agrícolas, la industria de fertilizantes es quien domina el sector, aunque, el poder de mercado de las principales empresas es el menos concentrado, sin embargo, la industria opera por medio de cárteles agrupados por producto, por ejemplo, tres de las empresas de fertilizantes más grandes del mundo (Potash Corp de Saskatchewan, Mosaic Company y Agrium) controlan la mayor parte de las ventas de potasa (p. 6).

Los fertilizantes químicos son causantes de gases efecto invernadero y contaminación del medio ambiente, debido a esto, los integrantes de la industria deben ser más astutos que los negociadores del clima en la Conferencia sobre el Clima de la ONU en París, al promover la "agricultura climáticamente inteligente" (p. 7).

Las grandes empresas de fertilizantes y de maquinaria agrícola están invirtiendo grandes sumas para datos masivos (Big Data) y en la agricultura de precisión (2). El hardware, como los tractores, cosechadoras, pulverizadores, jardineras, etc., se está equipando con herramientas digitales, como sensores remotos, imágenes aéreas, servidores de datos inalámbricos, entre otros, para precisar cómo, dónde y cuándo se debe sembrar, regar, así como aplicar pesticidas y fertilizantes (p. 8).

El clima y los datos masivos

En la década de 1980 la competencia de las empresas de semillas y pesticidas fue acompañada de programas del gobierno y de las universidades, posteriormente, se pasó simplemente al subsidio de inversión y desarrollo de las empresas. Actualmente, se está transitando a otra forma en la que los gobiernos pueden servir a las necesidades de las grandes empresas de insumos agrícolas, la cual es por medio de los seguros de cosechas.

No es sorpresa que los grandes de la agricultura tienen en sus manos los seguros de cosechas para garantizar que los agricultores compren sus productos. Ésta, es una práctica habitual en Estados Unidos, el seguro de cosechas más grande del mundo (China es el segundo). No obstante, también se realiza en Kenia y Ruanda, donde la fundación Syngenta ofrece seguros para los agricultores de maíz y trigo, brindando protección a aquellos que aceptan la compra de "semillas certificadas" y fertilizantes.

Las sequías de 2011 y las inundaciones en 2012, colocaron dudas de mantenerse en el negocio a las aseguradoras de cultivos. La cuestión es ¿pueden los datos masivos (Big Data), especialmente sobre meteorología y clima, regresar la rentabilidad (y confianza) a la industria de seguros de cosechas? o es el clima demasiado caótico para caber en una caja (p. 10).

Vulnerabilidad de Monsanto

El texto, realiza un paréntesis para señalar la vulnerabilidad en la que se encuentra Monsanto, apuntando que la empresa:

• Necesita adquirir nuevos productos químicos y diversificar sus fuentes de ingresos. La empresa ha impulsado sus ganancias durante dos décadas mediante el herbicida "Roundup", sin embargo, a nivel mundial, existen, al menos 24 super malezas resistentes a ese herbicida. Además, en marzo de 2015 la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, anunció que el glifosato "probablemente" es causa de cáncer y por su puesto, la noticia afecta a Monsanto.

• Alrededor de 85% de las ventas anuales de la empresa provienen de productos que están envejeciendo (en 2013, 44% de las ventas totales provenían de las semillas de maíz transgénico, 11% de las semillas de soya y en 2014, 30% de los ingresos fueron del herbicida Roundup).

• Existe bajo crecimiento de la agricultura. En 2014, Estados Unidos representó más de la mitad de las ventas totales de Monsanto y se prevé una reducción en casi un tercio de los ingresos agrícolas de este país para 2015.

• Intenta esquivar impuestos incorporándose a un país con una tasa impositiva más baja (un analista ha proyectado que la fusión con Syngenta permitiría a Monsanto reducir a la mitad su tasa efectiva de impuestos).

• Cambio de imagen corporativa. Sería una estrategia de la empresa para poder limpiar su nombre, siendo que entre los consumidores del mundo ya es conocido que Monsanto personifica los males de la agricultura industrial (p. 13).

Conclusiones

Estas megafusiones aumentarán costos, reducirán la innovación y disminuirán la diversidad. Autoridades de defensa de la competencia a nivel nacional (con atención en el sur global) deben revisar, reforzar y fortalecer las leyes antimonopolio. Todo esto coloca en peligro a la soberanía alimentaria y al cambio climático.

En el plano internacional es tema obligatorio para los gobiernos relacionar las mega-fusiones de las grandes empresas de la agricultura, la consolidación corporativa y los devastadores impactos sobre los medios de vida de pequeños agricultores, la seguridad alimentaria mundial, el cambio climático y la biodiversidad. Algunas de las acciones pueden incluir:

* Que los gobiernos reunidos en París en la conferencia sobre el clima de las Naciones Unidas (COP 21) rechacen la propuesta de la "agricultura climáticamente inteligente", y en su lugar se promuevan estrategias de resiliencia al cambio climático basadas en la agroecología.

* En las reuniones de 2016 del Comité de Seguridad Alimentaria Mundial, se asuma como cuestión urgente para hacer frente, a las mega-fusiones y sus impactos de concentración empresarial, respecto al tema de seguridad alimentaria.

* Las reuniones en Cancún del Convenio sobre la Diversidad Biológica (COP13) en 2016, deben examinar los impactos de la concentración empresarial en los alimentos y la agricultura, con un enfoque sobre una distribución justa y equitativa de la biodiversidad agrícola, especialmente para los pequeños productores en el Sur global (p. 16).


(1) La agricultura climáticamente inteligente (CSA) pretende mejorar la capacidad de los sistemas agrícolas para prestar apoyo a la seguridad alimentaria, e incorporar la necesidad de adaptación y las posibilidades de mitigación en las estrategias de desarrollo agrícola sostenible.

La CSA propone enfoques más integrados en relación con los desafíos fuertemente interrelacionados de la seguridad alimentaria, el desarrollo y el cambio climático, con el fin de ayudar a los países a determinar las opciones que les suponga un beneficio máximo y cuyas ventajas comparativas deban ponderarse (http://www.fao.org/climatechange/epic/que-hacemos/que-es-la-agricultura-...).

(2) La agricultura de precisión es un término agronómico que define la gestión de parcelas agrícolas en base a la observación, la medida y la actuación frente a la variabilidad inter e intra-cultivo. Requiere un conjunto de tecnologías formado por el Sistema Global de Navegación por Satélite (GNSS), sensores e imagen tanto satelital como aerotransportada, junto con Sistemas de Información Geográfica (SIG) para estimar, evaluar y entender dichas variaciones. La información recolectada puede ser empleada para evaluar con mayor precisión la densidad óptima de siembra, estimar la cantidad adecuada de fertilizantes o de otros insumos necesarios, y predecir con más exactitud el rendimiento y la producción de los cultivos.
(https://es.wikipedia.org/wiki/Agricultura_de_precisión)

Datos cruciales: 

Gráfica con ventas de semillas y agroquímicos en 2013 de las empresas BASF, Bayer, Dow, DuPont, Monsanto y Syngenta (p. 4).

Concentración de mercado en 2013 de las tres principales empresas en agroquímicos, semillas, maquinaria agrícola y fertilizantes (p. 5).

75% del control del mercado global de los pesticidas se concentra en seis empresas: Syngenta (20%), Bayer CropScience (18%), BASF (13%), Dow AgroSciences (10%), Monsanto (8%) y DuPont (6%) (p. 5).

71% del control del mercado global de los pesticidas se concentra en siete empresas: Monsanto (26%), DuPont (Pioneer) (21%), Syngenta (8%), Limagrain (5%), Dow AgroSciences (4%), KWS (4%) y Bayer CopSience (3%) (p. 5).

Listado de las diez principales compañías a nivel mundial de fertilizantes en 2013. Ventas, porcentaje con el que participan a nivel mundial y sus principales productos (p. 7).

Tabla con información sobre los grandes inversores en plataformas de datos de la agricultura, los socios y las alianzas (p. 9).

Gráfica de las diez empresas que dominan el mercado de semillas de vegetales en 2013. Cuatro empresas controlan 44% del mercado mundial (p. 12).

Gráfica de los diez principales países en el mercado de agroquímicos en 2013, en conjunto los diez países, representan 69% de las ventas en el mercado mundial. Brasil, Estados Unidos y China, son los tres más importantes (p. 12).

Las ofertas no concretadas de las grandes empresas de la agricultura son:

* En abril de 2015 Monsanto ofreció $45 mil millones de dólares a Syngenta para adquirirla. La oferta fue rechazada.

* En noviembre de 2011, Syngenta rechazó $42 mil millones de dólares, como oferta de la estatal ChemChina que tenía objetivo de adquirirla.

* DuPont está bajo presión por vender sus intereses agrícolas. Existen rumores de que su unidad de agricultura podría fusionarse con Dow.

* Bayer venderá su negocio de plásticos para centrarse en la industria farmacéutica y pesticidas / semillas.

* BASF aseguró una financiación a principios de 2015 para comprar Syngenta –y contrarrestar la oferta de Monsanto– (p. 4).

Nexo con el tema que estudiamos: 

El sector agrícola se presenta como uno de los pilares de los sectores estratégicos en el marco teórico-metodológico del cual partimos, referente a la producción estratégica mundial.

Se trata de un espacio esencial para la reproducción de la fuerza de trabajo y que aporta crecientes productos para otras actividades como los agrocombustibles. Como el conjunto de las actividades afectadas por la creciente centralización de los capitales, las industrias agroalimentarias devienen oligopolios y constituyen espacios de poder esenciales del capitalismo contemporáneo.

Entre las mayores empresas de la industria de alimentos vemos ofertas, propuestas, continuidad y avance técnico-científico, a la par que desarrollan discursos en los cuales la magia de la tecnología salvará al mundo de todo tipo de crisis a las que se enfrenta el sector y consecuentemente la sociedad. A causa de lo anterior, es imprescindible que se mantenga este tipo de línea crítica investigativa para mostrar la otra cara de la moneda y se pase a la acción en contra de la concentración del control y el poder en el mercado de alimentos.