Dreaming big. Why China needs bigger farms. Despite huge improvements since Mao's dire day, farming in China is still woefully inefficient

Cita: 

The Economist [2018], "Dreaming big. Why China needs bigger farms. Despite huge improvements since Mao's dire day, farming in China is still woefully inefficient", The Economist, London, 13 de enero, https://www.economist.com/news/china/21734394-despite-huge-improvements-...

Fuente: 
The Economist
Fecha de publicación: 
Sábado, Enero 13, 2018
Tema: 
Propiedad colectiva en China: límites al crecimiento de la agricultura
Idea principal: 

Desde los años ochenta China ha experimentado una profunda transformación agrícola, con un giro radical en su objetivo principal de producir granos para satisfacer las necesidades de la nación, transitando hacia un creciente interés en incrementar los ingresos rurales mediante el estímulo a la siembra de cultivos más rentables y un uso más eficiente de las tierras arables. La transformación no ha impedido que China deje de producir suficiente alimento para su población de 1.4 mil millones de habitantes (Dato Crucial 2), pero se han generado otra serie de conflictos como altos costos en términos de contaminación de suelo, agotamiento de agua y una priorización de la cantidad sobre la calidad de los alimentos (Dato Crucial 3).

La problemática también se observa en una baja productividad del trabajo rural (que utiliza 40% de la fuerza laboral pero que genera menos de 9% del PIB) y en una disminución de la migración del trabajo rural a las ciudades, resultando en un problema de subempleo en el campo(Dato Crucial 4).

Dado que todas las revoluciones exitosas en China han comenzado justo en el campo, el Partido Comunista está alarmado por la situación y ha puesto en marcha una serie acciones: en octubre del año pasado (2017) se decretó una "estrategia de revitalización" para el campo que "priorizará la agricultura" enfatizando una reforma en dos aspectos vitales:

1. Precios. Este año por primera vez el gobierno disminuirá la suma garantizada que pagaba a los granjeros productores de trigo. En 2015 los precios mínimos del maíz y la canola bajaron. Se cree que este cambio pueda generar una mayor eficiencia. Al mismo tiempo se disminuirán los incentivos para aquellos granjeros que cultivan granos en lugares donde los costos son altos (en términos de contaminación y recursos naturales). Por otro lado el gobierno seguirá aumentando los subsidios al campo.

2. Establecer límites en la tenencia de la tierra. Casi todas las tierras de cultivo en China son propiedad colectiva-comunitaria. Desde 2008 los agricultores tienen derecho a arrendar los derechos de uso de sus tierras, pero la falta de claridad legal en los límites de la extensión territorial ha generado un cuello de botella. Esto ha entorpecido el crecimiento de las granjas más grandes por la "propiedad colectiva" de la tierra, en su lugar, se han fomentado prácticas de ganadería y piscicultura, ya que los animales son considerados propiedad privada (Dato Crucial 6). Esto impide el crecimiento de grandes empresas privadas de cultivo.

Este 2018 los funcionarios completarán la entrega de certificados de derechos de uso a los agricultores detallando los límites de su parcela. Se espera que esto estimule la consolidación de grandes granjas. Aun así, otra dificultad será el otorgamiento de créditos para alquilar tierras ya que los derechos de uso de la tierra no pueden ser utilizados como garantía. Ante lo cual todavía no existen indicios de que China esté dispuesta en permitir la propiedad privada para que los agricultores acaparen las ganancias del aumento de los precios de la tierra. La revista ve en este punto el problema nodal del asunto y por lo tanto el crecimiento de las grandes granjas seguirá siendo lento.

Datos cruciales: 

1. Zhang Xinsheng es un ejemplo a seguir del modelo de granjero ideal en China. Actualmente es propietario de cuatro compañías y una granja donde los vegetales son cultivados en láminas de plástico. En 2012, estableció una inversión agrícola en la provincia central de Henan y le tomó seis meses acumular 53 hectáreas persuadiendo a los habitantes de arrendar sus parcelas de tierra. En 2017 adquirió otras 47 hectáreas en un menor tiempo. Ahora planea triplicar el tamaño de su granja y transformar el poblado de Luodian en un lugar especializado en la producción de vegetales.

2. En 2017 el cultivo de arroz rompió record, la producción de granos se ha incrementado más de 40% desde 2003. Los rendimientos de cereales por hectárea son mayores que los de Canadá.

3. China utiliza el doble de fertilizantes y pesticidas por hectárea sobre el promedio mundial, contribuyendo a niveles catastróficos de contaminación del suelo (Buried poison. China’s rockiest environmental problem: its soil). En regiones secas como es el caso del norte de China, los granjeros de trigo consumen más agua de lo que la región puede reemplazar.

4. La población agrícola de China disminuyó 100 millones entre 1996-2006, pero los diez años posteriores solo se redujeron 28 millones.

5. En 2016 más de la mitad de todos los granjeros eran mayores a los 55 años de edad, de los cuales únicamente la mitad habían terminado la educación primaria.

6. El censo más reciente registró 4 millones de "granjas de gran escala", que representan solo 2% del total. De las cuales 30% se dedican a la cría de ganado o de peces, en comparación con el 4% del total de las granjas.

Nexo con el tema que estudiamos: 

El "capitalismo de Estado" chino, o bien, la fuerte regulación y dirección de la reproducción del capital bajo el mandato (no absoluto pero fuerte) estatal chino, si bien ha tenido sorprendentes logros, no está exento de contradicciones que limitan su propio desarrollo. Una de ellas es el régimen de colectividad de la tierra, que como bien sabemos, en otros países capitalistas las reformas agrícolas de propiedad privada son la pieza angular del desarrollo de las grandes concentraciones privadas de capital en la agricultura. Sin embargo, a la luz de lo que sucede en las más poderosas agriculturas capitalistas, la concentración de la tierra no es la única ni la más eficiente solución: la agricultura ecológica que produce en pequeña escala pero puede trabajar colectivamente para alcanzar escalas y diversificación, debe ser explorada en busca no sólo de altos rendimientos sino de frenar la catástrofe ecológica y obtener alimentos benéficos para la salud de las personas y de la tierra.